La crisis política y económica en Zimbabwe y un nuevo programa para la reconstrucción y el desarrollo continental concentrarán la atención de la Cumbre Económica de Africa Austral, que comenzará este miércoles en Durban, Sudáfrica.
La situación en Zimbabwe es considerada una de las principales causas de la falta de confianza de los inversores en Africa austral. Economistas y analistas políticos temen que la crisis empeore a medida que se aproximan las elecciones presidenciales del año próximo.
También se prevé para 2002 una gran escasez de alimentos. La economía de Zimbabwe tambalea y no obtiene suficientes divisas para pagar su deuda externa o importar productos de primera necesidad, como el combustible.
El colapso de la economía de Zimbabwe repercutiría de inmediato en la vecina Sudáfrica y reduciría las perspectivas de crecimiento de la región. Las exportaciones a este país equivalen a 70 por ciento del producto interno bruto de Zimbabwe.
La Cumbre Económica de Durban, que concluirá el viernes, es convocada por el Foro Económico Mundial, con sede en Davos, Suiza, organización creada por empresarios, banqueros y políticos del mundo industrializado que promueve la liberalización comercial, la apertura y la desregulación de las inversiones.
Entre los invitados figuran el ministro de Finanzas de Zimbabwe, Simba Makoni, y el líder del opositor Movimiento por el Cambio Democrático, Morgan Tsvangirai.
Se prevé que Makoni y Tsvangirai compartan el estrado. «El objetivo es conocer a fondo la situación de Zimbabwe», explicó el director general del Foro Económico Mundial, Frederic Sicre.
Mientras, la reunión en Durban dará oportunidad a los empresarios internacionales de aportar sus ideas sobre el Programa Africano del Milenio, plan para el desarrollo del continente elaborado por Argelia, Nigeria y Sudáfrica por encargo de la Organización para la Unidad Africana (OUA).
Las empresas internacionales aprueban el programa, pero desean conocer más detalles sobre su aplicación y sus costos, dijo Sicre.
E Programa Africano del Milenio permitiría a los autoridades de Africa la cancelación de la deuda externa, atraer más inversiones, asistencia y mejores acuerdos comerciales a condición de que respeten los principios de buen gobierno y garanticen la estabilidad política.
Los gobernantes de Africa austral también discutirán mecanismos de estímulo a la integración económica regional y para reducir las diferencias tecnológicas respecto del mundo industrializado.
Se prevé que la Cumbre, bajo el lema «Actuando en las realidades: confontando percepciones», dará a la comunidad empresarial regional e internacional una perspectiva más ajustada sobre Africa austral y sus problemas, en momentos en que los inversores ven al continente con malos ojos.
La reunión también procurará convencer a los empresarios de la propia Africa austral de que la región es un buen lugar para colocar su dinero.
La desconfianza de los empresarios de la región es considerada una de las causas del temor entre los inversores internacionales.
Los gobiernos y empresarios muestran frustración, pues las cumbres anuales pasadas no lograron avances sustanciales en asuntos clave para retirar obstáculos en el camino al desarrollo económico de la región.
Los conflictos bélicos en Angola y en la República Democrática del Congo ahuyentan a los inversionistas, mientras que las barreras comerciales y la lentitud en la integración económica estorban el avance de la Comunidad para el Desarrollo de Africa Austral (SADC).
Pero la Cumbre no será un encuentro formal para tomar decisiones, sino más bien un ámbito para intercambiar ideas. Las conclusiones a las que se llegue podrán ser adoptadas por las partes como consideren conveniente.
«El gobierno y los empresarios discutirán sobre liberalizar la economía, disminuir las barreras comerciales, estimular la globalización y no sobre los derechos del trabajador», dijo el activista Mark Weinberg.
«Nos preguntamos por qué hay una cumbre informal para discutir estos temas, cuando ya existen foros como la Organización de las Naciones Unidas y la Organización Mundial del Comercio», añadió Weinberg.
Los activistas contra la globalización en Sudáfrica se preparan para realizar protestas contra la Cumbre. (FIN/IPS/as/mn/rp/mj/if dv/01
