Jóvenes de 13 a 18 años del Cono Sur de América podrán participar como protagonistas de un acontecimiento artístico que se expondrá este año en Madrid y en París. Para ello deben munirse de una cámara fotográfica y de algo más.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) convocaron este mes a jóvenes de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay para que tomen una fotografía que estimule una cultura de paz y no violenta.
Si bien se trata de países que no viven situaciones de conflicto armado, en la subregión se registra un alto grado de violencia ciudadana que es percibida de manera muy dramática entre los más jóvenes.
En Argentina, una encuesta realizada entre jóvenes por la Fundación Demoskopia arrojó que 70 por ciento considera a su sociedad inmersa en niveles de violencia "altos" o "muy altos", y sólo ocho por ciento cree que son bajos.
Consultados sobre las acciones que los jóvenes consideran violentas, incluyeron actos de gobierno que irían en contra de los intereses ciudadanos, represión policial, indiferencia generalizada ante los que sufren o mentiras de los funcionarios, en mayor medida que simples hechos delictivos.
Organizaciones no gubernamentales ya apelaron con éxito al recurso de tomar fotografías que sirvan para llamar la atención o eventualmente modificar situaciones de violencia en las que, a veces, los propios aficionados están inmersos sin darse cuenta.
En Brasil, por ejemplo, organizaciones que trabajan con problemas de violencia doméstica y alcoholismo ofrecieron cámaras a grupos familiares para que tomen imágenes de situaciones que procuraban revertir, y la sola confrontación con el cuadro final contribuía enormemente a la autocrítica y al cambio.
Pero en la convocatoria de la Unesco y la OEI, el desafío no termina en la fotografía.
Los jóvenes, que pueden participar en forma individual o en representación de escuelas u otras entidades, deberán elaborar además una leyenda para cada fotografía, de no más de 15 palabras.
El límite para los envíos -que serán recibidos en la oficina subregional de la OEI en Buenos Aires- es el 31 de mayo, y la preselección de los trabajos premiados se dará a conocer el 30 de junio.
Los trabajos destacados se expondrán en la sede central de la Unesco en París en septiembre, y un mes después en la de la OEI, en Madrid. Por el sólo hecho de ser mencionados recibirán certificados de esas dos organizaciones.
Alicia Talone, Profesional de Programas y Proyectos de la OEI, dijo a IPS que como base para el concurso se tomó el Manifiesto 2000 para una cultura de paz, que fue elaborado a pedido de la Unesco por un comité integrado por premios Nobel de la Paz.
"Nuestro objetivo es fomentar la participación y el compromiso de los jóvenes en una cultura de la paz", declaró Talone.
El Manifiesto 2000, que servirá de inspiración a los jóvenes fotógrafos, llama a respetar "todas las vidas" y la dignidad de las personas, sin discriminación ni prejuicios.
Rechaza la violencia, en particular hacia los más débiles, como niños y adolescentes, y llama a compartir tiempo y recursos materiales con los demás miembros de la comunidad.
El documento también plantea la necesidad de escuchar para una mejor comprensión, de defender la libertad de expresión y la diversidad de culturas, de dejar de lado el fanatismo, preservar el ambiente y promover un consumo responsable. Por último, llama a "reinventar la solidaridad".
Las fotos deben estar vinculadas con algún punto del Manifiesto 2000, y cuando se muestren los trabajos mencionados en París, se elegirá sobre esa base un ganador por cada punto, que recibirá una plaqueta otorgada por la Unesco y la OEI. (FIN/IPS/mv/ag/cr hd/00
