La Unión Europea (UE) espera que el compromiso político formulado por los presidentes de la Comunidad Andina (CAN) en la XI cumbre que se clausuró hoy en esta ciudad caribeña se traduzca en un mayor acercamiento entre los dos bloques.
Uwe Kaestner, delegado de la UE a la cumbre andina y la celebración de los 30 años de la firma del Acuerdo de Cartagena, dijo que las bases para este acercamiento están "en el diálogo político, las relaciones comerciales y el acceso preferencial" con los que ya cuentan en Europa numerosos productos andinos.
Kaestner, director general de política exterior de la embajada de Alemania en Colombia, indicó «de gran interés ver» que si de verdad se da a partir de la Cumbre «un verdadero impulso» a los nuevos lineamientos de política exterior de la CAN.
El relanzamiento de la política exterior de la CAN, hecho en el marco de la XI Cumbre por el Consejo Andino de Ministros de Relaciones Exteriores, buscará la convergencia de este bloque en los demás procesos de integración hemisférica, para lograr una mayor capacidad de negociación a nivel global.
Kaestner indicó que la CAN es considerada por la UE como "piedra angular en la integración de América Latina".
Pero algunos analistas estiman que las prioridades de la UE en América Latina están dirigidas al Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), por lo que una negociación de la CAN con ese bloque sudamericano le daría mayor peso a sus intentos de acercamiento.
El secretario general de la CAN, el venezolano Sebastián Alegrett, afirmó este miércoles al instalar la cumbre que la "profundización de las relaciones con Estados Unidos, Canadá y la UE" se vería favorecida con las negociacines que se llevan a cabo con el Mercosur.
La nueva política exterior de la CAN debe conducir a profundizar los vínculos con Europa, continente "al que nos unen lazos de comercio, inversión y cooperación de vieja data", afirmó el presidente de Colombia, Andrés Pastrana.
Los presidentes de la CAN fijaron en Sucre, en 1997, y en Guayaquil, en 1998, como temas básicos en sus relaciones con la UE el diálogo político, el acceso al marcado europeo, un acuerdo marco de cooperación y un diálogo especializado en la lucha contra las drogas.
Diana Pardo, investigadora de la privada Universidad de Los Andes, dijo a IPS que el diálogo CAN-UE debería incluir también temas como democracia, educación, cultura y migraciones "fundamentales para fortalecer la integración".
La experta subrayó que corresponde a los países andinos ampliar y fortalecer sus vínculos comerciales y políticos con la UE y el primer paso es mediante el acercamiento con el Mercosur.
Los dos bloques firmaron una declaración en la que se estableció que se celebrarían reuniones entre los jefes de Estado y de gobierno de los países miembros de la UE y de la CAN, así como entre los ministros de Relaciones Exteriores o de autoridades de las áreas que se aborden.
Los productos de los países de la CAN se benefician con el acceso preferencial a la UE, que les fue otorgado con el Sistema Especial de Preferencias Andinas (SPG Andino), en vigencia desde 1990 como compensación para naciones que combaten el narcotráfico.
En virtud del SGP Andino, que según la última prórroga estará vigente hasta el año 2001, la mayoría de los productos industriales y agrícolas ingresan al mercado europeo sin pagar aranceles.
Las exportaciones de la CAN a la UE durante 1998 fueron de 6.000 millones de dólares, suma superior a la del comercio intrabloque que en el mismo período se situó en 5.333 millones. (FIN/IPS/yf/ag/ip-if/99
