Los precios del petróleo cerraron la semana con un alza uniforme y casi imperceptible respecto al viernes anterior, mientras los contratos a futuro siguieron cayendo, ante la seguridad de los operadores de que los ataques contra Iraq no afectarán al mercado.
El barril del tipo Brent del Mar del Norte se vendió esta semana en 9,97 dólares y el referencial de Estados Unidos, el West Texas Intermediate (WTI), se colocó en 11,51 dólares, en un alza de 29 centavos frente al viernes 11 en los dos casos, informó el Ministerio de Energía de Venezuela
Pero en el mercado de futuros los dos crudos referenciales mantuvieron este viernes un comportamiento contrario, por la percepción de los operadores de que la sobreoferta al mercado se mantendrá a lo largo de los próximos meses, más alla de inesperadas contracciones puntuales por la crisis en el Golfo.
El Brent para entrega en febrero bajó por debajo de 10 dólares, para situarse en 9,99, 10 centavos menos que el jueves, mientras que el WTI para entrega en enero cayó siete centavos y cerró este viernes en Nueva York a 11,03 dólares.
Analistas y operadores de Londres y Nueva York coincidieron en mostrarse decepcionados por los resultados del encuentro ministerial que el jueves sostuvieron en Madrid los integrantes del Pacto de Ryad, Arabia Saudita, México y Venezuela.
Los tres países, que desde marzo han impulsado recortes concertados y voluntarios de suministro de crudo al mercado, se limitaron a reafimar las decisiones anteriores, prometer su aplicación en forma más disciplinada y extender su duración hasta fines de 1999.
Pero los tres grandes exportadores no llegaron a acuerdo alguno sobre nuevos cortes productivos, tal como requeriría un mercado con dos millones de barriles por día (bpd) de exceso de oferta, para quebrar la tendencia a la baja.
Esa percepción de una sobreoferta estructural el año próximo, cuando se espera que la demanda sólo se incremente en 1,2 millones de bpd, frente a los dos millones previstos meses antes, tiene más peso en el mercado que los efectos puntuales de los intensos y masivos bombardeos angloestadounidenses sobre Iraq.
Entre esos efectos se encuentra "el bombardeo limitado" a la refineria de Basora, la tercera más importante de Iraq, cn capacidad para procesar 126.000 bpd, según anunció este viernes el secretario de Defensa de Estados Unidos, Willian Cohen.
Pero tanto Cohen como las autoridades británicas han subrayado que no es su intención afectar otras instalaciones ni el flujo del crudo iraquí desde los puertos del golfo.
La razón del ataque a Basora, según lo alegado por Cohen, es que en esa refineria se habrían procesado volumenes clandestinos de crudo, que Iraq vendió en forma clandestina a través de sus vecinos, sin pasar a integrar el paquete que puede vender dentro de los acuerdos impuestos y controlados por Naciones Unidas.
El intercambio de crudo por alimentos concertado entre Iraq y Maciones Unidas establece una venta actual de Iraq que está en torno a 1,8 millones de bpd, a fin de obtener durante el semestre que está concluyendo unos 5,2 mil millones de dólares.
El boletín semanal del Ministerio de Energía venezolano precisó que la cesta de siete crudos que sirve como referencia a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se situó esta semana en 9,76 dólares el barril, mientras el coctel venezolano alcanzó los 8,08 dólares.
Los precios han caido 35 por ciento en promedio este año frente a 1997, para alcanzar niveles puntuales similares a los de la crisis de precios de 1986 y mantenerse en términos similares a los 30 años atrás.
Luis Téllez, el ministro de petróleo de México, dijo este viernes en Madrid, que Arabía Saudita y Venezuela, el primer y tercer exportador mundial y miembros de la OPEP, desestimaron un corte colectivo adicional de la organización de 1,5 millones de bpd.
Ese corte de los 11 miembros de la OPEP, que se sumaría al ya establecido de 2,6 millones de bpd, sería acompanado por otros 500.000 bpd de los productores independientes, con México a la cabeza. Los independientes cooperan desde junio con el compromiso de un corte productivo de otro medio millón de bpd.
El ex ministro venezolano de Energía, humberto Calderón, comentó en Caraas, que la tendencia a precios bajos, oscilantes y débiles, sólo se alteraría si la crisis en el Golfo se prolongase por un tiempo largo y afectase realmente la salida de los 2,1 millones de bpd que circulan por la zona. (Fin/IPS/eg/if/98
