Varios países de América Latina incorporan la educación de los consumidores a los programas educativos formales de jóvenes y adultos.
En la capital venezolana se realizará un seminario desde el 27 al 29 de este mes para el lanzamiento de un programa de educación de los consumidores en el ámbito de la enseñanza formal.
Este es el resultado de un trabajo conjunto entre la División de Educación de Adultos del Ministerio de Educación y la organización no gubernamental Iniciativa de los Consumidores.
Al seminario, que será inaugurado por el ministro de Educación, Antonio Cárdenas, asistirán maestros y autoridades del área de educación, así como representantes de organizaciones sociales y académicas.
Así mismo, el Ministerio de Educación de Brasil propuso incluir el tema de la educación del consumidor en los currículos escolares del quinto al octavo curso a partir de 1999 en todo el país.
La versión inicial de esa iniciativa expresa que las escuelas deben comprometerse en la formación de una ciudadanía crítica y responsable y estimular la participación social, para lo cual propone que los alumnos estudien cuestiones sociales cotidianas además de las materias tradicionales.
Las asignaturas sugeridas son ética, orientación sexual, pluralidad cultural, salud, medio ambiente, consumo y trabajo.
Este último binomio temático fue incluido para que la educación escolar contribuya a que los alumnos "desarrollen las capacidades necesarias para actuar como ciudadanos, trabajadores y consumidores".
Se optó por tratar ambos temas de forma integrada porque de acuerdo con la reforma propuesta, las prácticas de consumo impregnan la vida diaria escolar de diferentes maneras, como en la elección de material didáctico y en el desperdicio o reciclaje de materiales.
El documento está siendo sometido a especialistas, quienes deberán enviar sus opiniones al Ministerio. Su versión final será distribuida en las escuelas en el segundo semestre de este año.
Ya en 1995 y 1996 había comenzado en El Salvador la incorporación de los contenidos de la educación del consumidor en primero, quinto y sexto grado del ciclo de educación básica. Y actualmente, esos contenidos transversales están presentes en todos los planes de estudio reformados.
El Centro para la Defensa del Consumidor de El Salvador ha impulsado este desarrollo participando en forma conjunta con el Ministerio de Educación en la definición de contenidos, en la formación de más de 1.800 docentes y en la edición de materiales educativos para la educación básica y de adultos.
En Guatemala se presentó al Ministerio de Educación una "Propuesta Curricular de Contenidos en Educación del Consumidor para los Ciclos de Educación Fundamental y Complementaria".
La propuesta se basa en un trabajo de tesis en la carrera de Licenciatura en Pedagogía de la Universidad Rafael Landivar.
En Bolivia, la oficina regional de Consumers International desarrolló un proyecto de casi dos años que abarcó a más de 20 escuelas y centros de educación de adultos.
En Chile, el Ministerio de Educación aprobó en 1991 un programa de curso electivo denominado Economía y Consumo, para ser incluido entre las opciones ofrecidas a los estudiantes de la enseñanza media.
A partir de 1992, en el marco del convenio general de colaboración entre el Servicio Nacional del Consumidor y el Ministerio de Educación, se iniciaron en Chile los cursos de perfeccionamiento de profesores en el tema.
Un año después comenzó el programa de perfeccionamiento a distancia, en el que han participado hasta la fecha alrededor de 4.500 profesores de todo el país.
De acuerdo con Juan Trímboli, encargado del programa de Educación del Consumidor de la oficina Regional de Consumers International, este año "el énfasis estará puesto en un proyecto conjunto con el Comité Coordinador Regional del Mercosur, en el desarrollo de un programa de dos años en Ecuador, y en el fortalecimiento de las actividades en El Salvador y Perú".
Consumers International es una federación mundial de organizaciones de consumidores que tiene su sede central en Londres y oficinas regionales en Malasia (Asia-Pacífico), Zimbabwe (Africa) y Chile (América Latina y el Caribe). (FIN/Consumers International-IPS/98)
