El general chileno Augusto Pinochet fue recibido el jueves 27 en Ecuador por manifestaciones de protesta y con una denuncia penal por el asesinato de tres ecuatorianos y la desaparición de otro en Chile durante la dictadura que encabezó hasta 1990.
La demanda contra Pinochet, presentada a la Corte Suprema de Justicia, fue firmada por el ex presidente Rodrigo Borja, Juan de Dios Parra, secretario general de la Asociación Latinoamericana para los Derechos Humanos, el pintor Oswaldo Guayasamín y el escritor Jorge Enrique Adoum, entre otras personalidades.
Pinochet, comandante del ejército de Chile, llegó este jueves al balneario de Salinas, 560 kilómetros al suroeste de Quito, para participar de los actos de clausura de la XII Conferencia de Ejércitos Americanos (CEA).
El anuncio de la visita Pinochet, divulgado hace cuatro meses, dio lugar a manifestaciones de protesta, que continuaron este jueves.
La presión de organizaciones civiles de la sureña ciudad de Cuenca obligó a los organizadores de la CEA a trasladar la sede de la reunión de jefes militares de esa localidad a Salinas.
El abogado Alexis Ponce, portavoz de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos (Apdh), explicó a IPS que la demanda penal contra Pinochet se fundamenta "en la violación de los derechos humanos de cuatro ecuatorianos".
Según los denunciantes, los ecuatorianos Sócrates Ponce, Feddy Torres y Jimmy Torres fueron ejecutados durante el golpe militar contra el gobierno de Salvador Allende, en 1973, y Félix García, también originario de este país, desapareció tras ser secuestrado por las fuerzas golpistas.
"Existen antecedentes que hacen pertinente la presentación de esta demanda ante la justicia ecuatoriana", afirmó el Defensor del Pueblo, Julio César Trujillo
Trujillo destacó, como antecedente, que en España "se han iniciado procesos contra el régimen de Pinochet por la ejecución de cinco ciudadanos españoles".
Esas instancias judiciales se basan en el informe Retting, preparado en Chile por una comisión investigadora y considerado "el documento más completo sobre las violaciones a los derechos humanos en Chile", agregó.
El código penal ecuatoriano "establece la prescripción de las causas a los 10 años" de cometido el delito, y la denuncia contra Pinochet se fundamenta en hechos de 1973, comentó Elsie Monge, presidenta de la Comisión Ecuménica para los Derechos Humanos.
Pero "hemos argumentado que los delitos contra la humanidad no prescriben, de acuerdo con los convenios internacionales de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos, que fueron suscritos por nuestro país", puntualizó Monge.
En caso de que la demanda sea rechazada por la justicia ecuatoriana, "presentaremos el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos", agregó Ponce.
"Queremos que Pinochet, que representa el rostro de la impunidad y el terror en América Latina, esté en la cárcel y no como senador vitalicio de su país, como pretende", concluyó el portavoz de la Apdh.
Diciséis jefes militares de todo el continente asisten a la conferencia de Salinas, que comenzó el lunes y concluirá este viernes.
La participación de los ejércitos americanos en el desarrollo y en acciones de cooperación para la seguridad y la paz internacional, en el marco de una sociedad democrática es el asunto central de la reunión. (FIN/IPS/mg/ff/hd/97
