El auge comercial generado por la globalización obligó a la administración del canal de Panamá a acometer un costoso plan de modernización dirigido a mantener su competitividad ante otras rutas de transporte de mercancías.
Además de las costosas labores rutinarias de mantenimiento de las partes vitales de la vía interoceánica inaugurada en agosto de 1914, la actual administración binacional destinó mil millones de dólares para obras de modernización del canal antes del 2005.
El panameño Alberto Alemán, actual administrador general, dijo que en sus inicios el canal ejerció un monopolio en la ruta entre el este y el oeste, pero que con la globalización y la apertura comercial "tiene que actualizarse si quiere mantener su competividad".
Un aspecto adicional son las modificaciones técnicas sufridas por la marina mercante mundial, como es el caso de los anchos barcos "Panamax", que pasaron de un uno por ciento de los tránsitos en la década de 1980 a cerca de 30 por ciento del total de naves que cruzaron el canal en 1996, acotó Alemán.
Para que este tipo de barcos puedan pasar en forma simultánea por las partes más angostas del canal, la administración inició hace cuatro años un gigantesco movimiento de tierra y rocas a lo largo de los 13 kilómetros del llamado "Corte Culebra" con el fin de aumentar su capacidad.
El proyecto incluye la extracción de 70 millones de toneladas de tierra y rocas para ampliar el ancho del canal de 500 a 630 pies (un pie equivale a 31 centímetros) en las partes rectas, y hasta 730 pies en las curvas.
El ensanche incluye el desmonte de varios cerros ubicados en sus laderas con el propósito de evitar futuros derrumbes, como ha ocurrido en varias ocasiones anteriores.
Además de la ampliación del Corte Culebra, la administración planea sustituir el actual sistema electromecánico para mover las compuertas de las esclusas por un sistema hidráulico, así como adquirir 24 remolcadores y remozar las viejas locomotoras que impulsan a los barcos durante su cruce por las esclusas.
Un moderno sistema de control del movimiento de las naves por satélite también figura en el programa de inversiones hasta el 2005. Permitirá aumentar la capacidad de tránsitos entre 25 y 30 por ciento de su capacidad actual.
El actual canal de esclusas de doble vía de circulación está capacitado para admitir hasta 44 barcos diarios.
Junto con las obras de mejoramiento de la infraestructura del canal, la administración esta tratando de ordenar su traspaso a a la jurisdicción de Panamá, dentro de 28 meses, "de manera que el cambio pase desapercibido para los usuarios", acotó Alemán.
De acuerdo con los tratados canaleros de 1977, Estados Unidos debe cesar su presencia en el canal y traspasar la obra y sus actuales seis bases militares a Panamá en buenas condiciones de funcionamiento y sin que se vean afectados sus usuarios.
Sin embargo, la junta directiva binacional que gobierna el canal, integrada por cinco estadounidenses y cuatro panameños, decidió por mayoría aumentar los peajes que pagan los barcos 8,2 por ciento a partir de enero de 1997 y otro 7,5 por ciento desde el 1 de enero de 1998.
El aumento, que generó protestas de la Cámara Marítima Internacional y amenazas de buscar otras rutas alternas, procura reunir una suma adicional a los recaudos normales con el fin de costear el plan de modernización.
Alemán adujo que la modernización va a rendir beneficios para los usuarios y que son ellos quienes deben financiar el costo del valor agregado que van a recibir en el futuro cuando el tiempo de espera y de tránsito de las naves por el canal sea menor que el actual.
El funcionario afirmó que el actual canal interoceánico forma parte de un sistema marítimo mundial que incluye puertos, barcos, contenedores y otros equipos de propulsión diseminados en todo el planeta y que si uno de éstos falla se afecta todo el comercio internacional.
Por la ruta del canal de Panamá transita actualmente alrededor de cuatro por ciento de todas las mercancías que circulan por vía marítima a nivel mundial.
Las obras que se están realizando van a asegurar el tránsito seguro y expedito por el canal hasta por lo menos el 2040, aseguró Alemán.
La administración canalera recaudó 490 millones de dólares en concepto de peajes durante el año fiscal 1995/1996 cuando pasaron por el canal unos 14.000 barcos con cargas por un total superior a los 180 millones de toneladas. (FIN/IPS/sh/jc/if/97