El gobierno provisional de Ecuador inició hoy un proceso judicial contra el ex presidente Abdalá Bucaram y dos de sus secretarios particulares, acusados de gastar unos 80 millones de dólares de los fondos reservados de la presidencia.
Según César Verduga, ministro de Gobierno (interior), el proceso iniciará con una investigación sobre el destino de los fondos.
Después de emitida la sentencia "se realizarán las gestiones necesarias para pedir la extradición de Bucaram", que se encuentra en Panamá, indicó.
"Esto requiere de un trabajo de sensibilización hacia los gobiernos de los países donde se encuentren los funcionarios acusados", apuntó Verduga, quien dijo contar con documentos probatorios de las acusaciones, "la punta del iceberg de la corrupción dentro del 'bucaramato"'.
Bucaram habría gastado, a través de sus secretarios, 80 millones de dólares de una cuenta corriente de la presidencia para gastos reservados y de dos cuentas para fondos de inversión e imprevistos.
"En la última semana de su gobierno, este mes, se gastaron 27 millones de dólares", afirmó Verduga.
Según Hainz Moeller, presidente del Congreso unicameral, las pruebas contra Bucaram y otros funcionarios públicos,"son suficientes para sentenciarlos por peculado, cohecho y enriquecimiento ilícito".
El parlamento "deberá iniciar juicios políticos contra otros funcionarios relacionados con los gastos reservados", consideró Moeller, pues "el ex fiscal, por ejemplo, destruyó todos los comprobantes y recibos de las negociaciones hechas por la presidencia".
Bucaram fue cesado el día 6 en sus funciones por decisión de la mayoría de los legisladores, que lo declararon con "incapacidad mental" para ejercer su cargo.
Cinco días después, el presidente del parlamento, Fabián Alarcón, fue designado sustituto provisional de Bucaram hasta agosto de 1998 y Bucaram abandonó el país rumbo a Panamá.
El ex presidente declaró en ese país centroamericano que iniciaría una gira por otras naciones del continente, para denunciar que fue "víctima de un golpe de Estado".
Los gobiernos de los países que ha visitado lo recibieron como un ciudadano ecuatoriano más, incluida Argentina, donde mantiene lazos de amistad con el presidente Carlos Menem.
Este miércoles Bucaram retornaría a Ecuador para encabezar una gran manifestación con sus seguidores en protesta por la resolución del Congreso.
"Es poco probable que venga, ya que le podría esperar una orden de prisión", dijo a IPS Napoleón Saltos, diputado del bloque parlamentario indígena.
La decisión del parlamento coincidió con una huelga nacional y una serie de marchas de protesta encabezadas por amplios sectores de la sociedad, que se opusieron a las medidas económicas impuestas por el gobierno y a los actos de corrupción y nepotismo que fueron denunciados incluso por el embajador estadounidense en Quito.
Para algunos analistas, lo actuado por el Congreso fue técnicamente un golpe de Estado, que contó con el apoyo masivo de la población pero que pone en tela de juicio la legitimidad del nuevo gobierno provisional.
"El parlamento supo recoger las demandas del pueblo e interpretar la ley para cesar al presidente", comentó a IPS Lourdes Rodríguez, de la Coordinadora de Movimientos Sociales.
"La designación de un gobierno interino encabezado por Alarcón, ya fue producto de la negociación entre partidos políticos y esa será siempre la cruz de esta administración", concluyó. (FIN/IPS/mg/97)
