Organizaciones sociales, laborales y políticas de Ecuador convocaron hoy para la semana próxima a una gran jornada de protesta contra el programa económico del gobierno de Abdalá Bucaram.
Según la Coordindora de Movimientos Sociales de Ecuador, que agrupa a unas 150 organizaciones de diversos sectores, el día 10 se realizará la "gran jornada de protesta" en Quito, "donde los ecuatorianos tendrán la oportunidad de pronunciarse sobre el proyecto del presidente Bucaram", según un comunicado.
"Es un programa que quiere ser impuesto sin el consenso de la sociedad ecuatoriana y cuyo principal sostén es la venta de toda la capacidad industrial del Estado a la empresa privada", consideró Marcelo Román, líder de los trabajadores de la estatal Petroecuador y miembro de la Coordinadora.
En la noche del domingo, en un discurso de más de tres horas, el primer mandatario anunció oficialmente el programa económico de su gobierno, cuyo principal eje es la convertibilidad monetaria, como se aplicó en Argentina en 1991.
La convertibilidad es un sistema de cambio que consiste en que cada sucre (moneda local) que circule en el mercado se encuentre avalado por la reserva monetaria internacional (RMI).
Al entrar en vigencia ese esquema, el 1 de julio de 1997 según anunció Bucaram, el Banco Central de Ecuador (BCE) adoptará un tipo de cambio fijo, en base a una nueva paridad cambiaria con la divisa estadounidense.
"Con la convertibilidad no existen posibilidades de devaluar la moneda, lo que permite la estabilización de la economía y la reducción de los índices inflacionarios, ya que los precios se mantienen constantes", explicó el jefe de Estado.
"Es un modelo que requiere de una férrea disciplina fiscal", arguyó Bucaram, por lo que dispuso una serie de reformas laborales, fiscales y políticas, con el objeto de mantener elevada la RMI.
Entre estas medidas, que actualmente estudia el parlamento, destaca la venta parcial de Petroecuador y otras entidades del Estado, la flexibilización laboral, la ampliación de la base tributaria y el aumento a los impuestos de bebidas alcohólicas y cigarrillos, en 240 y 300 por ciento respectivamente.
"Se trata de uno de los programas más neoliberales de los últimos tiempos", sostuvo Luis Macas, jefe del bloque parlamentario indígena Nuevo País Pachakutik.
"Nosotros hacemos un llamado a la desobediencia civil y convocamos a todo el pueblo ecuatoriano a la marcha de protesta del próximo 10 de diciembre", señaló.
La marcha de protesta contará con el apoyo de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, dijo Nina Pacari, dirigente de esta organización que agrupa a los 10 pueblos autóctonos que habitan en el el país. (FIN/IPS/mg/dg/ip-if/96)
