La Corte Constitucional de Colombia rechazó la reapertura del proceso contra el presidente Ernesto Samper por las denunciaa sobre aportes del narcotráfico a su campaña electoral.
El organismo dejó, sin embargo, abierta la vía para un nuevo juicio "si existen nuevos hechos y pruebas" que lo comprometan.
El fallo negó el recurso de tutela (recurso de amparo para los derechos individuales) que presentó el ex ministro de Justicia Enrique Parejo, quien consideró que se había violado su derecho a constituirse en parte civil en el proceso seguido por el Congreso, que absolvió a Samper en junio.
Con una votación de siete contra dos, la Corte determinó que la Comisión de la Cámara de Diputados que investigó a Samper no violó la ley, pues consideró que Parejo no estaba facultado para intervenir en el proceso como representante de la sociedad civil.
Uno de los magistrados de la Corte, Hernando Herrera, indicó que el fallo tiene carácter de "cosa juzgada", por lo que no es posible la reapertura del proceso.
Con la decisión de la Corte Constitucional "se demuestra que el orden jurídico todavía se impone", y la solidez de "los fallos tiene que respetarse", dijo Daniel Suárez, presidente del Consejo de Estado, que controla al gobierno desde el punto de vista jurídico.
Pero los magistrados Vladimiro Naranjo y Eduardo Cifuentes, que votaron a favor de la petición de Parejo, consideraron que el caso debía reabrirse, porque el Congreso al investigar a Samper sobre un hecho delictivo estaba desempeñando una función penal.
Samper fue denunciado por la Fiscalía por los presuntos delitos de enriquecimiento ilícito, encubrimiento y fraude al Estado.
Parejo deploró "profundamente que el país haya perdido la oportunidad de revisar un proceso y un fallo que fue una vergüenza para Colombia".
La decisión de la Corte fue calificada de previsible por Oscar Angel, dirigente del opositor Partido Socialista de los Trabajadores (PST), no tanto por sus consideraciones jurídicas sino por el momento político que vive el país.
La reapertura del juicio a Samper constituye "un imposible político", por las implicaciones que tendría para la ya deteriorada economía y porque contribuiría a aumentar aún más el pesimismo generalizado que vive el país, afirmó.
No obstante, Angel considera que los sectores opositores a Samper seguirán presionando para que se produzca la salida del mandatario del gobierno.
Contra Samper se alinean el ex vicepresidente Humberto de la Calle, quien renunció al cargo para liderar su movimiento político, un sector del Partido Conservador, segunda fuerza política colombiana, y el Consejo Gremial Nacional, que reúne a los 15 sectores más importantes de la producción.
Las encuestas indican que los colombianos se encuentran divididos en partes iguales entre los partidarios de que Samper permanezca en el cargo y los que sostienen que debe renunciar. (FIN/IPS/yf/ag/ip/96
