La Cumbre Mundial de la Alimentación, a celebrarse la próxima semana en la capital italiana, buscará reducir a la mitad el número de personas que padecen hambre, se anunció hoy oficialmente.
La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) dio a conocer la Declaración de Roma y el Plan de Acción, los dos documentos que firmarán los jefes de Estado y de gobierno participantes en la Cumbre Mundial.
La reunión será inaugurada el día 13 con un mensaje del Papa Juan Pablo II y finalizará el 17.
Con poco más de una semana de antelación, un hecho sin precedentes en este tipo de reuniones, y después de siete meses de negociaciones, el Comité de Seguridad Alimentaria de FAO logró acuerdo sobre los dos materiales que serán presentados a los líderes del mundo.
"Consideramos intolerable que más de 800 millones de personas de todo el mundo, en particular de los países en desarrollo, no dispongan de alimentos suficientes para satisfacer sus necesidades básicas de nutrición", afirma la Declaración.
El Plan de Acción exhorta a la comunidad internacional a enfrentar "las múltiples causas de la inseguridad alimentaria, en un esfuerzo continuo para erradicar el hambre en todos los países".
El objetivo inmediato consiste en reducir a la mitad en el 2015 la cantidad de personas desnutridas.
El Director General de FAO, Jacques Diouf, invitó a 196 jefes de Estado y de gobierno a la histórica Cumbre, que se celebrará en la sede central de la organización.
Aunque por motivos de seguridad todavía no se ha dado a conocer la lista de asistentes, se aguarda la presencia de unos cien líderes, entre ellos los ppresidentes Fidel Castro, de Cuba, y Nelson Mandela, de Sudáfrica.
"Se trata de la primera vez en la historia de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en que se ha alcanza acuerdo con antelación al comienzo de una conferencia importante. Generalmente se sigue negociando hasta ultima hora", destacó el presidente del Comité de Seguridad Alimentaria, el embajador chileno Pedro Medrano.
La secretaria general de la Cumbre, Kay Killingsworth, señaló en conferencia de prensa que la reunión constituirá un apoyo importante para Africa y América Latina en la lucha por la erradicación del hambre.
La utilización de los alimentos como arma política, como el embargo estadounidense contra Cuba y el de la ONU contra Iraq, fue uno de los puntos mas controvertidos, dada la resistencia de Estados Unidos al tratamiento del asunto.
Finalmente, se logró consenso para la incorporación del siguiente texto: "Los alimentos no deberían emplearse como instrumento de presión política y económica".
"Reafirmamos la importancia de la cooperación y la solidaridad internacionales, así como la necesidad de abstenerse de aplicar medidas unilaterales que no estén en consonancia con el derecho internacional y con la Carta de la ONU y pongan en peligro la seguridad alimentaria", concluye el párrafo acordado.
Killingsworth sostuvo que ese texto representa una condena moral de los embargos, aunque aclaró que no se trata de un acuerdo vinculante, sino de fuerza moral.
Un experto que participó en la presentación de los documentos, Jacques Vercuil, recordó que el embargo de Estados Unidos a Cuba ha sido condenado en otras cumbres internacionales.
Vercuil aclaró que no hay contradicción con las sanciones impuestas por la ONU a Iraq, dado que los documentos que surgirán de la Cumbre no son de FAO, sino de sus países miembros.
La Declaración de Roma, que consta de tres páginas, expresa que "los problemas del hambre y la inseguridad alimentaria tienen dimensión mundial y es probable que persistan e incluso se agraven dramáticamente en algunas regiones si no se adopta con urgencia una acción decidida y concertada".
Así mismo, reconoce "el derecho fundamental de toda persona a no padecer hambre".
"La democracia, la promoción y protección de todos los derechos humanos y libertades fundamentales, inclusive el derecho al desarrollo, y la participación plena y equitativa de hombres y mujeres, son indispensables a fin de alcanzar la seguridad alimentaria sostenible para todos", se consignó en la Declaración.
El Plan de Acción contiene siete compromisos, cuya finalidad es "la seguridad alimentaria a nivel individual, familiar, nacional, regional y mundial". (FIN/IPS/jp/ff/dv/96
