El gobierno de México actúa de forma autoritaria al calificar de provocación que se enfrentará "aplicando la ley" la anunciada presencia de dirigentes zapatistas en esta capital, afirmaron hoy representantes de diferentes sectores sociales.
No existe ninguna norma que limite el libre tránsito de los miembros del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), por lo que la actitud del gobierno es ilegal, dijo a IPS Emilio Krieger, miembro de la Asociación de Abogados Democráticos.
La dirigencia del EZLN, que desde principios de septiembre mantiene en suspenso su diálogo de paz con el gobierno del presidente Ernesto Zedillo, es uno de los invitados principales al Congreso Nacional Indígena, que se realizará en la capital mexicana entre los días 8 y 12.
La Secretaría de Gobernación advirtió en un comunicado difundido la noche del lunes que cualquier traslado de miembros del EZLN fuera del sureño estado de Chiapas constituye un acto "de provocación deliberado".
En caso de concretarse la visita de los zapatistas a la capital sin transitar por la vía de los acuerdos, la autoridad tendrá la "obligación irrenunciable" de aplicar la ley para garantizar la seguridad, apuntó la Secretaría de Gobernación.
Krieger aseguró que el gobierno pretende reactivar las órdenes de detención contra los zapatistas emitidas en febrero de 1995, argumentando que la norma que amnistió temporalmente a la dirigencia guerrillera para promover el diálogo se habría roto al abandonar Chiapas.
El jurista recordó que la Ley para el Diálogo, la Conciliación y la Paz Digna en Chiapas garantiza el libre tránsito de los zapatistas mientras el diálogo no haya sido declarado roto, cosa que no ha sucedido.
Además, la norma que alienta el diálogo señala que el EZLN es "una organización de ciudadanos mexicanos", por lo que tienen, como cualquier persona, todos los derechos de libre movilización, opinó el miembro de la Asociación de Abogados Democráticos, que reúne a juristas vinculados a grupos opositores.
Los organizadores del Congreso Nacional Indígena afirman que los zapatistas, que desde enero de 1994 no han salido de Chiapas, vendrán a la capital mexicana a pesar de las advertencias, pero la dirigencia del grupo no ha informado aún su decisión final sobre la visita.
Portavoces del Frente Amplio para Constitución del Movimiento para La Liberación Nacional, grupo opositor creado en torno a las propuestas políticas del EZLN, acusaron al gobierno de prepotente por impedir "sin más argumento que la amenaza" que los zapatistas visiten la capital.
El conflicto de Chiapas vive momentos difíciles luego que el EZLN suspendió el diálogo con el gobierno demandando que se detenga la militarización, se libere a presentos zapatistas detenidos y se integre una comisión que verifique el cumplimientos de los acuerdos.
Además, la Comisión Nacional de Intermediación (Conai), que preside el obispo Samuel Riuz, se pronunció por ampliar el diálogo a otros sectores sociales y grupos armados para enfrentar la situación de "violencia generalizada" que reina en el país.
"Deseo que recapaciten (los zapatistas), que reconozcan que el interés y el compromiso del gobierno por ese diálogo es genuino", dijo Zedillo, tras rechazar que exista una coyuntura de violencia en México y pedir a la Conai que defina su papel entre mediador o actor político.
En alusión a la presencia del Ejército Popular Revolucionario, grupo armado que hizo su aparición en junio, el mandatario mexicano llamó al EZLN a no especular con situaciones que surgen coyunturalmente.
El gobierno afirma estar dispuesto a atender la mayoría de las demandas de los zapatistas para regresar a la mesa de negociaciones, pero se niega a cambiar el formato y alcance del diálogo con ese grupo armado.
Si el gobierno dice que son factibles de responder las demandas del EZLN por qué no lo ha hecho, se interrogó el obispo Ruiz, uno de los 120 candidatos a recibir este año el Premio Nobel de la Paz. (FIN/IPS/dc/ag/ip/96