Una filmación que muestra a decenas de presos desnudos y corriendo en uno de los patios de la cárcel Modelo, mientras varios custodios los golpean con palos y cachiporras, generó una ola de repudio y críticas contra el sistema carcelario de Panamá.
Las escenas fueron tomadas desde un edificio cercano a la cárcel por el canal 13 de la televisión y presentadas por lo menos en tres ocasiones entre el lunes y el martes.
Según indicó el director de la prisión, Ricardo Reynolds, los reclusos apaleados habían asesinado minutos antes a dos de sus compañeros por rencillas internas.
Tras admitir su responsabilidad en la tortura, Reynolds justificó su actitud en que los internos maltratados "habían violado los derechos humanos de sus dos compañeros" muertos.
El caso motivó un comunicado del presidente Ernesto Pérez Balladares, quien expresó "profunda indignación" ante lo sucedido, y desató críticas y demandas de castigo contra los culpables de parte de la Iglesia Católica y comités de defensa de los derechos humanos.
El presidente del Comité Panameño por los Derechos Humanos Oswaldo Velázquez, indicó que "es vergonzoso el ataque con palos contra reclusos desnudos e indefensos tratados como animales".
Velázquez estimó que las escenas presentadas por el canal de televisión son semejantes "a los castigos que aplicaban los nazis contra los judíos en los campos de concentración" durante la segunda guerra mundial.
Agregó que este país "puede ser sancionado" por la Comisión Internacional de los Derechos Humanos de Naciones Unidas por violar la convención contra la tortura y los tratos crueles y degrandantes, de la cual Panamá es signataria.
En tanto, Marcelina Samaniego, del no guberntamental Centro de Capacitación Social, manifestó a IPS que "es intolerable" que actos de esa naturaleza ocurran en las cárceles de Panamá.
Tras aclarar que "no hay justificación" para un acto de ese tipo, Samaniego pidió que "se apliquen sanciones contra los responsables".
La Iglesia Católica también reclamó, a través del obispo Romulo Emiliani, una investigacion urgente del caso y pidió al gobierno que cierre la cárcel Modelo por constituir un centro totalmente inapropiado para la rehabilitación del infractor.
Emiliani subrayo que esa prisión "parece más un cementerio para hombres vivos" que un centro de reclusión.
Construida en la década de 1930 para 250 reclusos, la cárcel Modelo alberga actualmente más de 1.200 internos, 80 por ciento de los cuales no han recibido sentencia.
Pero la Modelo no es ninguna excepción, sino que su caso es similar al resto del sistema carcelario del país, en el que se encuentran recluidas 7.500 personas.
La cárcel Pública de la ciudad de Colón, en el Caribe, la de la occidental ciudad de David y la de la Chorrera, en el sector oeste de la provincia de Panamá, son escenario de frecuentes amotinamientos, intentos de fuga y reyertas, debido al mal estado de las instalaciones y al hacinamiento de internos.
Este mes murieron cuatro reclusos en la Modelo como consecuencia de riñas y tentativas de fuga. (FIN/sh/ff/hd/96)
