El principal partido opositor de Jamaica y una organización civil cubanojamaiquina solicitaron hoy al gobierno la reconsideración de la decisión de deportar a un grupo de 63 emigrantes de Cuba.
Este miércoles las autoridades de Jamaica anunciaron que el grupo de cubanos, llegado el mes pasado tras un viaje en bote de 144 kilómetros, será deportado a su país de origen.
El Partido Laborista de Jamaica atacó al gobierno por su decisión, calificándola de "inhumana", mientras el vocero Ossie Harding sostuvo que los cubanos deberían obtener permiso para permanecer en Jamaica, dado que está claro que huyeron de la opresión política del gobierno de Fidel Castro.
Rosa Rosales, secretaria de la recientemente creada Asociación Cubana de Jamaica, afirmó que "los refugiados sufrirán toda clase de acosos si regresan a Cuba", y añadió que "algunos serán encarcelados".
Pero según el ministro de Relaciones Exteriores y Comercio Exterior, Seymour Mullings, el gobierno realizó consultas con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), y su gobierno está convencido de que la repatriación es la medida correcta.
Mullings dijo que los cubanos son tratados como inmigrantes ilegales porque no han probado a las autoridades ser refugiados políticos, y el gobierno no tiene motivos para creer que serán maltratados a su regreso a Cuba.
Los cubanos que llegaron a Jamaica entre enero y marzo, incluyendo doctores, abogados y otros profesionales, fueron en una primera etapa instalados en estaciones de policía en Montego Bay, donde desembarcaron, pero luego se los trasladó a viviendas privadas, ante la creciente simpatía pública que despertaron.
El gobierno de Jamaica tiene antecedentes de regresar a los refugiados a sus países. Aproximadamente unos 100 haitianos que llegaron a la isla a comienzos de la década de 1990 fueron devueltos a Haití cuando en 1994 se recuperó la estabilidad y el entonces presidente Jean-Bertrand Aristide regresó al país. (FIN/IPS/tra-en/cb/da/lp/ip-pr/96)
