Portugal esta empenado en impedir que la cultura lusofona sea desplazada por la creciente influencia anglofona en Mozambique, al tiempo que defiende el "afro- lusitanismo" en todos los frentes donde se siente amenazado por britanicos y franceses.
A su regreso este viernes a Lisboa, tras una visita oficial de cuatro dias a Mozambique, la mas poblada de las cinco ex colonias portuguesas del Africa, el Secretario de Estado de Cooperacion (vicecanciller), Jose Lamego, expreso que los dos paises se empenaran en lazos mas intensos.
Durante su visita, Lamego se reunio con el ministro de Educacion mozambiqueno, Arnaldo Nhavotso, garantizandole el apoyo de Lisboa para desarrollar la ensenanza a distancia, un sistema nuevo que sera instalado en marzo por tecnicos portugueses, asi como para la formacion de profesores.
Con el ministro de Cultura, Juventud y Deportes, Mateus Khatupa, acordo la construccion de un nuevo Centro Cultural Portugues en Maputo y la creacion de varios centros de lectura en barrios de la capital y en el interior del pais, asi como la restauracion del patrimonio arquitectonico luso-africano comun.
Otra area en que Portugal comprometio su apoyo es la de la reestructuracion de la policia, reiterado por Lamego en la reunion que sostuvo con el ministro de Interior mozambiqueno, Manuel Antonio.
El vicecanciller no menciono el desagrado de Lisboa por el ingreso de Mozambique a fines del ano pasado a la Comunidad Britanica de Naciones, pero los analistas coinciden en que el gobierno socialista intentara corregir los errores del anterior ejecutivo de centroderecha liberal en el Africa lusofona.
Los socialistas culpan al ex primer ministro Anibal Cavaco e Silva (1985-95) de haber sostenido una politica comercial pragmatica con los Paises Africanos de Lengua Oficial Portuguesa (PALOP), grupo formado por Angola, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Mozambique y Santo Tome-Principe, relegando la cooperacion.
En su discurso de la victoria, el 1 de octubre pasado, el secretario general del Partido Socialista y actual primer ministro, Antonio Guterres, dijo que Brasil, el mayor pais lusofono del mundo, sera "la prioridad de las prioridades".
Pero anuncio que su gobierno incrementaria sustancialmente la cooperacion con los PALOP.
Antes de asumir Guterres, segun los socialistas, Lisboa desarrollo una politica estrictamente comercial o "cargada de declaraciones sentimentales" sobre los lazos centenarios de Portugal con los paises que hablan su lengua.
"En terminos pragmaticos, en lo que interesa a brasilenos y africanos poco o nada se hizo y mas que de una 'cooperacion portuguesa', lo que hubo fue una 'cooperacion a la portuguesa', o sea, ineficaz", ironizo recientemente el influyente "Diario de Noticias" de Lisboa.
La creciente perdida de influencia cultural en el Africa lusofona fue durante una decada mas bien una preocupacion de intelectuales portugueses y de los PALOP que de las autoridades del liberalismo portugues en el poder en los ultimos 10 anos.
Los intelectuales denuncian que mientras en Mozambique el ingles avanza a paso seguro, en los otros cuatro paises afro- lusofonos Paris ya abrio centros culturales y regalo a las poblaciones receptores con el dial bloqueado en la sintonia de Radio France.
Para mantener viva la lengua y cultura lusitana en los cinco paises, se coincide en que Portugal solo podra tener exito mediante una solida alianza con Brasil, porque un "combate cultural" a solas contra Londres y Paris en terreno africano seria una especie de suicidio quijotesco de Lisboa.
En tal sentido, los socialistas portugueses se estan empleando a fondo para realizar el primer semestre de este ano en Lisboa, la cumbre de los siete jefes de Estado lusofonos y formalizar el proyecto de la Comunidad de Paises de Lengua Portuguesa (CPLP).
Segun recordo Lamego a su regreso a Lisboa, Maputo sera la sede de las reuniones de los ministros de Deporte de la CPLP, un proyecto del ex ministro de Cultura brasileno Jose Aparecido de Oliveira, el 28 de febrero, y de los cancilleres del grupo, el 18 y 19 de abril.
La CPLP pretende dar forma organica a la hasta ahora dispersa cooperacion entre los 219 millones habitantes de los siete paises, los territorios luso-asiaticos de Goa, Diu y Damao (India), Timor Oriental (anexado por Indonesia) y el enclave luso-chino de Macao.
Tan solo en este contexto, de un "Commonwealth a la portuguesa" con fuerte condimento brasileno, los expertos en asuntos internacionales estiman que Lisboa podra en el futuro jugar un papel relevante en el mundo que otrora colonizo y con el cual ahora intenta cooperar en forma eficaz. (FIN/IPS/md/ag/dv- ip/96)
