Los medios del Pacifico Sur relegaron la noticia de la ultima explosion nuclear de Francia ante informaciones sobre el acuerdo de paz en Bosnia-Herzegovina y la princesa Diana, pero los lideres de Asia-Pacifico no han bajado el tono de sus protestas.
Por cuarta vez en menos de tres meses, los gobiernos de Nueva Zelanda y Australia plantearon este miercoles ante sus respectivos embajadores franceses su disgusto frente a la continuacion del programa de pruebas nucleares de Francia, mientras Japon y el Foro del Pacifico Sur emitieron declaraciones de protesta.
La ultima prueba subterranea se realizo a las 21.30 GMT de este martes, en el atolon de Mururoa, donde tambien tuvieron lugar la primera y tercera prueba, mientras la segunda se registro en el atolon de Fangataufa.
La explosion de este miercoles, equivalente a 15 kilotones de toneladas de explosivos convencionales, o a la potencia de la bomba que destruyo Hiroshima, no fue el tema central de los medios de comunicacion regionales e internacionales, indicando que el procedimiento ha perdido su valor como noticia.
Pero gobiernos y ambientalistas de la region estan determinados a no dejar que Francia, que continua desoyendo las criticas internacionales, siga adelante con un programa previsto hasta fines de mayo de 1996.
El primer ministro en funciones, Don McKinnon, admitio ante los periodistas tras reunirse con el embajador frances Jacques Le Blanc, que el procedimiento "posterior a la explosion" se esta convirtiendo en una farsa.
"Estoy exasperado, frustrado y extremadamente abatido, pero es importante que aclaremos al gobierno frances a traves de su representante cual es nuestra posicion frente a esta cuestion", dijo McKinnon.
Pero los partidos de oposicion creen que ha llegado el momento de que el gobierno de Nueva Zelanda registre su protesta con acciones y no solo mediante palabras.
"El gobierno ha decidido simplemente resignarse ante la decision francesa de continuar con las pruebas, y no hace nada para sostener nuestra posicion como pais antinuclear", dijo Tau Henare, miembro maori del parlamento y vicepresidente del pequeno partido Nueva Zelanda Primero.
El Partido Laborista y el partido Alianza han hecho un llamado a la expulsion del embajador frances.
Pero el primer ministro de Nueva Zelanda, Jim Bolger, dijo en Hanoi durante una visita oficial que el gobierno no tenia intenciones de expulsar al embajador frances.
"No lo consideramos una opcion porque necesitamos dialogar con los franceses, y tarde o temprano esperamos persuadirlos de su equivocacion", dijo Bolger.
Segun el primer ministro, Francia ha contribuido a difundir el argumento moral de que las armas atomicas no tendran lugar en un mundo civilizado.
Pero el embajador frances Le Blanc respondio diciendo que la reaccion de Nueva Zelanda a las pruebas nucleares se baso mas en la emocion que en la logica.
"Las armas nucleares solo son armas politicas, y no estan disenadas para ser utilizadas. Este es el significado de una medida disuasiva. Estoy harto de historias sobre Francia bombardeando al mundo (…) estamos contribuyendo a la estabilidad del mundo", dijo Le Blanc.
Francia ha indicado que realizara otras dos o tres pruebas para poner a punto su sistema de simulacion nuclear, y luego suscribira un tratado que prohibe los experimentos, poniendo fin a 25 anos de pruebas en el Pacifico Sur.
Pero grupos ambientalistas y la mayoria de los gobiernos del todo el mundo sostienen que las pruebas deberian finalizar ahora.
La reciente cumbre de la Comunidad Britanica de Naciones condeno en Auckland las pruebas, mientras la semana pasada el Comite de Desarme y Seguridad Internacional de Estados Unidos voto 95 a 12 contra los experimentos.
"La region ha sido puesta a prueba por estas resoluciones", dijo Iieremia Tabai, secretario general del Foro del Pacifico Sur, de 15 miembros, anadiendo que la ultima explosion ha "erosionado aun mas" las relaciones con el Pacifico Sur.
La organizacion internacional Greenpeace dijo que la prueba de este miercoles fue una cachetada para la Comunidad Britanica de Naciones y la Organizacion de las Naciones Unidas (ONU), anadiendo que Gran Bretana tambien se coloco en la linea de fuego por el apoyo dado a Francia ante las protestas internacionales.
El primer ministro britanico, John Major, se distancio de la declaracion de condena elaborada por los lideres de la Comunidad Britanica de Naciones entre el 10 y el 13 de noviembre. (FIN/IPS/tra-en/kc/cpg/lp/en-ip/95
