El ministro del Interior de Colombia, Horacio Serpa, nego rotundamente haber acusado al gobierno estadounidense de conspirar contra el presidente Ernesto Samper.
"Ni el gobierno ni el ministro del Interior vincularon en ningun momento, ni para ningun efecto a la DEA (agencia antidrogas estadounidense) con el caso de la criminal agresion al doctor (Antonio) Cancino", abogado del presidente colombiano, indico Serpa en un comunicado.
El ministro "lamento mucho" las interpretaciones que algunas autoridades de Estados Unidos dieron a sus declaraciones y la incomodidad que pudieron causarles, pero manifesto la seguridad de que "en nada afectaran las relaciones entre los dos paises».
Serpa hizo esta precision tras una larga reunion con Samper, durante la cual analizaron las duras reacciones del gobierno de Estados Unidos, segun las cuales el atentado se inscribe dentro de una conspiracion que no excluye a la DEA.
Pero las declaraciones que causaron verdadero revuelo en medios gubernamentales fueron las del vicefiscal Adolfo Salamanca, quien denuncio que "el gobierno no quiere que se sepa la verdad" y que existen miembros de la cupula del pais involucrados en actividades ilegales.
A las acusaciones del vicefiscal respondio el ministro del Interior, quien en declaraciones a radiomisoras locales afirmo que los miembros del gobierno actual ya fueron condenados y que fue cerrada la investigacion, sin previo juicio.
El gobierno colombiano continua analizando las reacciones de los departamentos de Estado y Justicia estadounidenses y la DEA, que rechazaron categoricamente las declaraciones de Serpa sobre el atentado contra el defensor de Samper.
El Departamento de Estado interpreto estas declaraciones como un esfuerzo del gobierno colombiano por desviar la atencion de las investigaciones sobre los presuntos vinculos con el narcotrafico y aseguro esta clase de actitud solo puede tener efectos negativos en las relaciones bilaterales.
La DEA, en tanto, manifesto la esperanza de que Serpa dirija su atencion "directamente contra la mafia de la droga, que ha destruido vidas y asesinado ciudadanos de Colombia y de Estados Unidos, en lugar de estar exponiendo absurdas teorias de conspiraciones". (FIN/IPS/am/ag/ip/95
