El atentado de que fue objeto hoy el abogado del presidente de Colombia Ernesto Samper, Antonio Cancino, fue atribuido por el gobierno a un plan de desestabilizacion apoyado por fuerzas externas.
"Existen fuerzas interesadas en que el presidente no pueda probar su inocencia" en el juicio que se le sigue en el Congreso por presunta utilizacion de fondos del narcotrafico en su campana electoral, afirmo el jefe del Departamento Administrativo de Seguridad (policia secreta), Ramiro Bejarano.
Bejarano no senalo nombres propios, pero afirmo que "hay una conjuncion de propositos para sacar de lugar al presidente" y "desatar una nueva guerra fraticida en Colombia".
A su vez un comunicado de la Presidencia de la Republica destaco que se esta fomentando un clima propicio para una conspiracion que puede ser aprovechado por "intereses nacionales y extranjeros".
Horacio Serpa, ministro del Interior, indico la posibilidad de que funcionarios de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) y de la embajada de ese pais en Bogota esten detras de una conspiracion contra Samper.
"Hay altos funcionarios de la embajada americana que en reuniones sociales hacen toda clase de conjeturas y especulaciones" sobre la caida de Samper, dijo Serpa de acuerdo a informes de una radio rpivada.
La Presidencia pidio al fiscal Alfonso Valdivieso, que se encuentra en Washinton, regresar al pais, por considerar que funcionarios de ese organismo formularon declaraciones "inconvenientes".
Segun el gobierno, de la Fiscalia se han filtrado informaciones que contribuyeron a agudizar la polemica sobre la investigacion abierta por la posible vinculacion de dinero del narcotrafico en la ultima campana electoral.
El ataque a Cancino fue reivindicado telefonicamente ante los medios de comunicacion por un vocero anonimo de un hasta ahora desconocido Movimiento por la Dignidad de Colombia, que habria anunciado el inicio de un plan para desestabilizar al gobierno.
Segun la radioemisora Caracol, la voz anonima anuncio que la lista de posibles victimas esta encabezada por Samper y tambien la integran la esposa del mandatario, Jacquin Strauss, el ex ministro de Defensa Fernando Botero, Serpa, el investigador del mandatario Heyne Mogollon y otras personalidades.
Mogollon afirmo este miercoles que constantemente recibe amenazas, al igual que los otros 14 mienbros de la comision de Acusaciones de la Camara de Diputados que investiga preliminarmente a Samper.
"Es el inicio de una escalada contra los corruptos" afirmo el portavoz de la organizacion que se atribuyo el atentado contra el abogado del presidente.
Algunos analistas aseguraron que ese movimiento podria estar vinculado al desarticulado Cartel de narcotraficantes de Cali.
Cancino resulto levemente herido en el ataque, en el que murieron dos de sus escoltas y producido cuando el abogado salia de la universidad Externado de Colombia, donde se desempena como catedratico.
El jurista salvo su vida tendiendose en el piso del automovil. Tras la huida de sus atacantes, ensangrentado, tomo un taxi que lo llevo hasta el hospital donde fue intervenido quirurgicamente.
Segun fuentes policiales, en el ataque participaron cuatro personas, de las cuales por lo menos dos estarian heridas.
Cancino habia estado este martes junto a Samper durante los interrogatorios a que el presidente fue sometido por la comision de Acusaciones.
Tras la indagatoria, que duro mas de ocho horas, Samper se dirigio a los colombianos en un mensaje por television, en el que afirmo haber desvirtuado "en su integridad las burdas acusaciones" de que ha sido objeto.
El tesorero de la campana electoral de Samper en 1994, Santiago Medina, afirmo haber recibido entre cinco y seis millones de dolares del Cartel de Cali por orden del presidente y de Botero.
Samper respondio que en caso de que ello fuera verdad se habria producido a sus espaldas y formaria parte de una estrategia global del narcotrafico para golpear a su gobierno.
Segun fuentes del Ejecutivo, el ataque a Cancino es una muestra de que la defensa de Samper va por buen camino y de que ante esa derrota las fuerzas que desean la caida del mandatario se ven obligadas a recurrir al terrorismo. (FIN/IPS/yf/dg/ip/95
