Informes contradictorios de la marina de guerra portuguesa sobre el hundimiento de un buque cargado con explosivos y municiones coloco al comando naval en dificultades frente al gobierno y la opinion publica, movilizada por grupos ambientalistas.
El ministro luso de Defensa, Fernando Nogueira, citado este viernes por el analista Eduardo Mascarenhas, expreso a los jefes navales que "no entiendo porque el hundimiento fue considerado un exito, cuando en realidad se verificaron errores en la preparacion y conduccion de la operacion".
El transporte de tropas "Sao Miguel", dado de baja por la Armada, fue hundido en octubre de 1994 en el Oceano Atlantico fuera del limite de 200 millas de la costa portuguesa. El buque se fue a pique cargado con 2.000 toneladas de municiones, armas y explosivos calificados de obsoletos.
La operacion previo que la nave con su carga quedara depositada a 4.000 metros de profundidad y no representara riesgo ecologico.
Sin embargo, tanto las organizaciones no gubernamentales (ONG) ambientalistas, como el semanario "Visao" y el matutino "Diario de Noticias" de Lisboa, acusaron a la Armada de hundir el "Sao Miguel" con sustancias peligrosas en sus bodegas.
Segun las denuncias, la carga contenia fulminantes de aluminio, fosforo blanco, plastico y otras sustancias que la ONG "Liga de Proteccion de la Naturaleza" (LPN) califico de "peligrosas para la salud". Ademas afirmo que el hundimiento en el mar de ese tipo de elementos esta prohibido por las leyes internacionales.
La LPN advirtio que "algunos productos, propagandose a traves de la cadena trofica, podrian haber llegado ya a la mesa de los portugueses", porque es el pueblo que mas consume pescado por habitante en el mundo.
La cuestion fue practicamente archivada tras las explicaciones de rigor de Nogueira al Parlamento en noviembre pasado. El ministro tranquilizo a los diputados y la opinion publica al asegurar que la operacion "fue un exito" y no habia peligro.
Sin embargo, el caso nuevamente salto a primer plano de actualidad el 10 de febrero cuando siete cajas conteniendo armas y municiones fueron encontradas flotando a pocos metros de algunas playas turisticas de la costa lusa.
En una primera reaccion, el comando naval nego que los restos provinieran del "Sao Miguel", pero una semana mas tarde debio rendirse ante la evidencia y envio un nuevo informe al ministro en el cual admitio que hubo errores en la operacion.
Mascarenhas revelo que durante la reunion de esta semana del Consejo Superior Militar, Nogueira pidio una aclaracion sobre las razones que llevaron a las fragatas que se encontraban en la zona en el momento del hundimiento, a no recuperar las cajas flotantes.
El analista sostuvo que el ministro esta bastante "insatisfecho" porque el primer informe de la marina le hizo declarar que el comportamiento de Portugal en el caso del "Sao Miguel" fue elogioso y sera presentado como ejemplo sobre la manera que se deben realizar esas acciones.
El golpe de gracia para el comando naval provino de un informe del Instituto de Meteorologia, conocido este viernes, que fue solicitado por el Partido Ecologista Verde (PEV) y contradice la version de la Armada sobre la magnitud de la explosion que provoco el hundimiento del transporte.
En su informe original, la marina estimo que para la explosion que causo el hundimiento del "Sao Miguel" fueron necesarios 200 kilos de trinitrotolueno (TNT).
Sin embargo, el informe del Instituto de Meteorologia, divulgado por el PEV indico que en el momento del estallido fue detectado un sismo de magnitud 3,7 en la escala de Richter.
Esa perturbacion normalmente es generada "por la liberacion de una cantidad de energia que equivale a una variacion de entre 1,2 y 2,5 toneladas de TNT", dijo el Instituto. (FIN/IPS/md/ego/en).
= 02241046 DAP004
