Venezuela envio tres batallones de su ejercito (unos 2.000 hombres), y agregara cinco helicopteros artillados, como refuerzo a las unidades que en su frontera occidental se aprestan a repeler la guerrilla colombiana, confirmo el canciller Miguel Angel Burelli.
El gobierno venezolano "no solo exigio a Colombia una profundizacion de su lucha antiguerrillera, sino que ademas tambien adopto sus propias medidas", dijo Burelli tras reunirse con los gobernadores de los cuatro estados fronterizos con el vecino pais.
El ministro de la Defensa, el general Rafael Montero, regreso de Bogota y explico que firmo con su colega Fernando Botero "un manual de procedimiento para regular operaciones, comunicaciones, reuniones y coordinaciones" en la frontera comun.
En tanto, el ministro de Asuntos Fronterizos, el socialista Pompeyo Marquez, reitero su critica al Estado colombiano "que es corresponsable de los ataques guerrilleros perpetrados en los ultimos meses contra objetivos militares venezolanos".
De esas incursiones, la mas grave fue el ataque, el primero de noviembre, del Ejercito de Liberacion Nacional contra un convoy del ejercito venezolano cerca de La Victoria, 700 kilometros al suroeste de Caracas, matando a dos soldados e hiriendo a cinco.
El gobierno del presidente Rafael Caldera reacciono alarmado, la cancilleria demando a Bogota que "cumpla sus compromisos" en materia de seguridad fronterizo, y Marquez sostuvo que "hay una ausencia del Estado colombiano en su frontera".
Autoridades de ambos paises efectuaron una reunion sobre seguridad en la frontera y los ministros de Defensa se dieron cita en Bogota para facilitar "operaciones militares coordinadas" en la frontera, ademas de incrementar el intercambio de informacion de inteligencia, segun dijo Montero.
En la reunion entre el gobierno central y los gobernadores regionales, Marquez mantuvo una posicion "dura" frente a Bogota "porque es grave el abandono de toda la frontera, y asi lo hemos hecho saber al gobierno colombiano".
"Hay disposicion de Venezuela a fortalecer sus fronteras y a exigir de Colombia que, en bien de nuestras relaciones, se convierta a la frontera en una zona de paz", dijo Marquez.
Colombia y Venezuela, paises andinos, se embarcaron hace cinco anos en un acelerado proceso de integracion economica e intercambio comercial que crecio sin cesar hasta 1993, cuando alcanzo 1.600 millones de dolares, cifra que podria repetirse este ano.
Ambos gobiernos ademas pusieron sordina al historico diferendo que sostienen por la delimitacion pendiente de las areas marinas y submarinas que les corresponden al norte de su frontera terrestre e involucran aguas del Mar Caribe y del Golfo de Venezuela.
Pero la extensa frontera comun, de unos 2.000 kilometros, semeja segun analistas "un tercer pais", porque padece el impacto de la accion de la guerrilla colombiana, secuestros de ganaderos, de los carteles de la droga y es via para el trafico de vehiculos robados y el contrabando de bienes, especialmente gasolina.
Los gobernadores regionales reclamaron al gobierno central "un plan global e integral" que ataque los flagelos en la frontera.
El canciller dijo que con las medidas de refuerzo militar "si la guerrilla colombiana atraviesa la linea fronteriza tendra que enfrentarse al fuego de nuestras Fuerzas Armadas, porque no habra contemplaciones de ningun tipo".
Burelli fue mas comprensivo que Marquez en sus declaraciones y dijo que el interes del gobierno colombiano "es grande y sincero. Lo que ocurre es que ellos estan con serias dificultades porque la guerrilla ha controlado zonas dificiles de retomar por el Estado colombiano, y son precisamente las zonas fronterizas". (Fin/IPS/hm- eg/rp/94
