NACIONES UNIDAS – Donald Trump, cuya cascada de propuestas precipitadas y mal concebidas continúa, ha amenazado con «tomar el control de Gaza», convertirla en una «Riviera de Medio Oriente» y trasladar a los palestinos a Egipto y Jordania, dos antiguos aliados de Estados Unidos que dependen en gran medida del apoyo estadounidense para su supervivencia.
El presidente de Estados Unidos también ha insinuado que ambos países sufrirían recortes o la eliminación de miles de millones de dólares en ayuda económica y militar si se niegan a cooperar con él.
¿Es esto real o solo una amenaza vacía?
La propuesta de ocupación de Gaza ha sido condenada por prácticamente todos los líderes árabes que han abogado durante mucho tiempo por una patria palestina en toda regla en la Franja de Gaza.
En una entrevista con Christiane Amanpour, presentadora internacional de la red de noticias por cable CNN, se citó al príncipe Turki al Faisal, exembajador saudí en Estados Unidos y Reino Unido, diciendo que la estrategia de Trump para Gaza es un «plan de limpieza étnica demencial».
Ramzy Baroud, periodista y editor de The Palestine Chronicle, dijo a IPS que los árabes no pueden aceptar el plan de limpieza étnica de Trump simplemente porque hacerlo desestabilizará toda la región y todos sus regímenes.
Las repercusiones de la limpieza étnica original de los palestinos en 1948 todavía se sienten en todo Medio Oriente hasta hoy, destacó.
En aquel momento, la mayoría de la población nativa de la patria palestina fue desplazada, alrededor de 800 000 personas, la mayoría de las cuales permanecieron desplazadas dentro de la Palestina histórica.
Desplazar a una población de 2,2 millones, tras un genocidio que ha encendido la ira en todo Medio Oriente y en todo el mundo, argumentó, es una medida suicida para los regímenes árabes que ya están luchando en una búsqueda desesperada de legitimidad.
«Creo que Trump ya lo sabe, pero está utilizando las amenazas para presionar a los regímenes árabes para que presenten un plan ‘alternativo’ destinado a desarmar a la resistencia palestina, y así llegar a un acuerdo con Israel», dijo Baroud.
Pero, a su juicio, «en esencia, los árabes no tienen control sobre el resultado de la guerra en Gaza».
Si Israel no ha conseguido desarmar a Gaza tras 15 meses de una guerra de exterminio, los árabes no podrán hacerlo,consideró Baroud, autor de seis libros sobre la región e investigador principal no residente en el Centro para el Islam y los Asuntos Globales (Ciga).
En una entrevista con France 24, el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, resaltó que el plan de Trump de «limpieza étnica no es aceptable en nuestro mundo».
«En la búsqueda de soluciones, no debemos empeorar el problema. Es vital mantenerse fiel a los cimientos del derecho internacional. Es esencial evitar cualquier forma de limpieza étnica», dijo Guterres previamente ante el Comité de las Naciones Unidas para el ejercicio de los derechos inalienables del pueblo palestino.
Dirigiéndose a los miembros del Comité el 5 de febrero, Guterres dijo: «En esencia, el ejercicio de los derechos inalienables del pueblo palestino se trata del derecho de los palestinos a simplemente vivir como seres humanos en su propia tierra».
Sin embargo, prosiguió, «hemos visto cómo la realización de esos derechos se aleja cada vez más de nuestro alcance», así como «una escalofriante y sistemática deshumanización y demonización de todo un pueblo».
Baroud consideró que el príncipe Al Faisal tiene razón al llamarlo «un loco plan de limpieza étnica», porque «eso es».
Pero fracasará si los árabes entienden las intenciones estadounidenses y centran sus energías en apoyar la firmeza palestina en Gaza, analizó.
A su juicio, Israel se encuentra en su posición más débil en décadas y, aparte de las amenazas vacías y la retórica, le quedan muy pocas cartas.
La unidad árabe es ahora clave, reflexionó, «y creo que una respuesta colectiva podría influir positivamente en las relaciones internas árabes y volver a centrar Palestina como la causa impulsora de todas las naciones árabes».
De hecho, esta podría ser la oportunidad para que la Liga Árabe vuelva a ser importante, después de décadas de marginación e irrelevancia, consideró Baroud.
Durante su gira por Israel, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, concluida este miércoles 19, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, pudo calibrar la amplia oposición árabe al plan de Trump, mientras aparentemente restó importancia a la propuesta.
The New York Times citó a Rubio diciendo que Trump simplemente estaba tratando de «obtener una reacción» y «convencer» a otras naciones para que proporcionen más ayuda a la Gaza de la posguerra.
Rubio deja Medio Oriente en vísperas de que el viernes 21 se celebre en Arabia Saudí una cumbre de los seis países del Consejo de Cooperación del Golfo junto con Egipto y Jordania, para discutir la respuesta a la idea presentada por Donald Trump para Gaza.
Puede leer aquí la versión en inglés de este artículo.
El rey Abdalá II de Jordania, que lidera un país que ya alberga a unos 700 000 refugiados palestinos, sirios e iraquíes, dijo a Trump durante una reunión en la Casa Blanca el 11 de febrero que está dispuesto a ofrecer un hogar a unos 2000 niños palestinos que necesitan atención médica.
Y tal vez nada más.
La propuesta de tomar el control de Gaza y el traslado forzoso de palestinos se consideran un crimen de guerra y un crimen contra la humanidad, según la Corte Penal Internacional (CPI).
Janina Dill, codirectora del Instituto de Ética, Derecho y Conflictos Armados de Oxford, dijo a The New York Times: «Trump está convirtiendo casualmente grandes crímenes internacionales en propuestas políticas. Simplemente normaliza la violación, o la propuesta de violación, de los principios fundamentales absolutos del derecho internacional».
Mientras tanto, el presidente de Egipto, Abdel Fattah al Sisi, anticipó que no viajará a Washington para mantener conversaciones en la Casa Blanca, si la agenda incluye el plan de Trump de expulsar a los palestinos de Gaza, según fuentes de seguridad egipcias.
En una conversación telefónica con Al Sisi el 1 de febrero,Trump le extendió una invitación abierta al presidente egipcio para visitar la Casa Blanca, pero hasta ahora no se ha fijado fecha para esa visita.
La toma de control de Gaza también será el tema principal en la agenda de una reunión de emergencia de la Cumbre de la Liga Árabe, que finalmente se celebrará en El Cairo el 4 de marzo, tras ser pospuesta su fecha inicial del 27 de febrero.
T: MF / ED: EG