Desde el 2014, la reducción del hambre no progresa en América Latina y el Caribe. En 2018 la subalimentación afectaba a 42,5 millones de personas, 6,5 por ciento de los habitantes de la región, más que la población conjunta de Chile, Uruguay y Ecuador.
Con esas cifras como contexto, de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), 60 legisladores de 23 países llamaron a los países a desarrollar acciones urgentes para ubicar el derecho humano a la alimentación en lo más alto de las agendas públicas ante el aumento de la malnutrición en la región, ya que por cada persona que sufre hambre, más de seis sufren sobrepeso.
El anuncio de los legisladores ocurrió durante el VII Encuentro de Planificación del Frente Parlamentario contra el Hambre de América Latina y el Caribe, celebrado en el Centro de Formación de la Cooperación Española de Cartagena de Indias, en Colombia.
“Hoy son más los latinoamericanos y caribeños que no cuentan con alimentos sanos y nutritivos para vivir adecuadamente. Como legisladores debemos superar las divisiones y trabajar juntos, con el apoyo de FAO, por una meta común: la erradicación total del hambre y la malnutrición”, sostuvo Jairo Flores, coordinador general del Frente Parlamentario contra el Hambre de América Latina y el Caribe.
Avances legislativos para alcanzar malnutrición cero
En Sudamérica, los legisladores de los frentes parlamentarios contra el hambre han generado leyes de gran impacto: en Paraguay, por ejemplo, aprobaron recientemente una ley de protección a la agricultura familiar, mientras que en Uruguay aprobar legislación que fomenta la agroecología.
En tanto, gracias a la labor del Frente contra el hambre de Colombia, en junio dicho país aprobó una ley para la reducción de pérdidas y desperdicios de alimentos, iniciativa que Argentina, Brasil, Perú y Chile están trabajando en sus propios parlamentos.
“Dentro de los resultados es importante destacar la Ley de Etiquetados de Chile, una política exitosa que está siendo replicada en Guatemala, Paraguay, Argentina, Colombia, Perú, entre otros países”, dijo Jairo Flores.
En la zona mesoamericana, los frentes han trabajado en leyes para una agricultura más sostenible. “Como frentes llamamos a los legisladores a generar las condiciones necesarias para que la gente de nuestro campo no se vean en la obligación de emigrar”, dijo Teresa Cálix, diputada hondureña y coordinadora de los Frentes contra el Hambre de Mesoamérica.
En el Caribe, los frentes de Haití, San Vicente y las Granadinas, República Dominicana, Granada y Belice están promoviendo la alimentación escolar a través de leyes que mejoran la disponibilidad y el acceso a alimentos saludables y nutritivos para los niños, niñas y adolescentes.
Alianza Iberoamericana contra el hambre y la malnutrición
Tras la Primera Cumbre Parlamentaria Mundial contra el Hambre y la Malnutrición realizada en octubre de 2018 en Madrid, la Alianza Parlamentaria a favor del derecho a la alimentación de las Cortes Generales de España y el Frente se han unido para trabajar juntos por el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 2: Hambre Cero.
“Los legisladores de América Latina y el Caribe, las Cortes Generales de España y los parlamentos de Portugal estamos trabajando para formar una alianza iberoamericana que pueda contribuir con mayor fuerza al Hambre Cero”, sostuvo Moni Pizani, directora de la Oficina Subregional de la Secretaría General Iberoamericana.
“El Frente Parlamentario contra el Hambre ha logrado ser un referente para Europa y el resto del mundo gracias a su trabajo en red, donde se prioriza una nueva forma de hacer política basada en el consenso y la pluralidad”, complementó Luis Lobo, 0ficial del Programa España – FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).
Diez años de los Frentes
Actualmente, existen más de 20 congresos nacionales y asambleas legislativas de la región que son parte del Frente Parlamentario contra el Hambre, una red regional que reúne a legisladores de diferentes grupos políticos interesados en generar leyes y aprobar presupuestos adecuados para la seguridad alimentaria y nutricional.
El 2019, los frentes parlamentarios contra el hambre cumplieron una década de trabajo; estos grupos legislativos, originales de América Latina y el Caribe, han generado más de 30 leyes orientadas a contribuir a la transformación de los sistemas alimentarios.
“Los Frentes Parlamentarios contra el Hambre son nuestros activos más preciados. Sus legisladores no sólo hacen leyes, sino que también fiscalizan en el terreno el cumplimiento de las políticas y aprueban presupuestos”, dijo Alan Bojanic, Representante de la FAO en Colombia, durante el encuentro de planificación.
Los frentes son apoyados por la FAO, la Cooperación Española y la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, mediante el Programa Mesoamérica sin Hambre.
El Frente, además, reúne a cuatro parlamentos regionales como el Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino), el Parlamento del Mercado Común del Sur (Parlasur), el Parlamento Andino y el Parlamento Centroamericano, instancias que han declarado la lucha contra el hambre y la malnutrición como acción prioritaria.
“Desde los parlamentos regionales tenemos un fuerte compromiso con la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible. Junto con el Frente estamos trabajando diversos instrumentos para combatir a nivel continental el flagelo del hambre”, agregó Pablo González, secretario general del Parlatino.
Este artículo fue publicado originalmente por la Oficina Regional de la FAO para América Latina y el Caribe. IPS lo distribuye por un acuerdo especial de difusión con esta oficina regional de la FAO.
RV: EG