La crisis económico-financiera de España se agudiza sin que se perciba algún tipo de solución, pese a optimistas declaraciones en contrario del gobierno, advierten sindicalistas, que preparan una jornada de protesta para el 20 de este mes.
El principal y más rápido efecto de la crisis es el aumento de la desocupación, que según el último informe del Ministerio de Empleo y Seguridad Social con datos al cierre de mayo ya afecta a 24,3 por ciento de la población económicamente activa, cuando ese indicador en la Unión Europea (UE) se ubica a un promedio de 10,3 por ciento.
Expertos coinciden en que la situación laboral empeoró desde la llegada en diciembre a la presidencia del gobierno español del derechista Mariano Rajoy, y la posterior aprobación de una reforma laboral que, entre otras cosas, flexibilizó los despidos, reduciendo las indemnizaciones y simplificando los compromisos de los empresarios en la materia.
Esa reforma "no servirá para nada positivo" y mucho menos para solucionar el problema del desempleo que sufren más de cuatro millones de españoles, dijo a IPS el secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), Cándido Méndez.
El líder de una de las dos mayoritarias centrales de trabajadores de España indicó que lo que se debe hacer es cambiar el modelo productivo del país, apuntando a fórmulas que no lleven a las empresas a destruir empleos.
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Una de las medidas que se debería tomar es instaurar premios públicos (en dinero) para las empresas que contraten a mayores de 45 años y a jóvenes menores de 20, añadió a modo de ejemplo.
Sin embargo, el presidente de la Comisión Europea, el portugués José Manuel Durão Barroso, cree que la fórmula de salvamento a la banca española en graves dificultades financieras anunciada por la UE ayudará a recomponer las cosas. Es una muestra de "habilidad" del bloque para "reaccionar rápido" ante dificultades de algunos de sus 27 miembros, como España, sostuvo.
No obstante, la Comisión, el órgano ejecutivo de la UE, admite que la reforma, "a corto plazo, puede conducir a un aumento del desempleo", aunque luego "permitirá restaurar las condiciones para contratar trabajadores de forma permanente",
Otro tema en el que la Comisión advierte problemas es en la segmentación del mercado laboral, pues entiende que las reformas, por las cuales los nuevos contratos de las pequeñas y medianas empresas (Pymes) permiten incorporar períodos de prueba largos, "pueden convertirse en sustitutos de los contratos temporales".
Tomando en cuenta esta situación, Rajoy envió una carta a Durao Barroso y al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, planteándole que se impulsen la "integración fiscal y bancaria" de la UE.
Fuentes cercanas a Rajoy señalaron que, además, les propuso en la misiva reformas estructurales coordinadas por todos los países del bloque para fomentar la integración del proyecto comunitario con una mayor unión fiscal y bancaria.
En estas iniciativas está presente la crisis de Bankia, uno de los principales bancos de este país, que llevó al gobierno a solicitar y obtener de la UE un crédito por 100.000 millones de euros (126.000 millones de dólares) para impedir su hundimiento y el de otras financieras de menor orden.
Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), los bancos españoles requieren de inmediato al menos 37.000 millones de euros (47.000 millones de dólares) para sortear la crisis y, acotaron sus especialistas, posiblemente luego el doble.
Si bien Bankia es la principal entidad con problemas, los inversionistas y las agencias calificadoras de riesgo prevén que otras de tamaño mediano necesiten inyecciones de capital.
Con estas cuestiones en el aire, la UGT y la pro comunista Comisión Central de Comisiones Obreras convocaron a manifestaciones callejeras en toda España para el 20 de este mes, que coincidirán con el término del debate parlamentario sobre los Presupuestos Generales del Estado para este año, cuando se prevé se confirme la reforma laboral y todas las otras medidas de austeridad anunciadas.
Esta severa crisis económico-financiera, que afecta a la mayoría de los países de la UE y pone en especial vulnerabilidad a los trabajadores, lleva a los líderes sindicales a analizar la posibilidad de convocar una huelga general en todo el bloque por primera vez desde su creación, indicó Méndez.
Desde el lado gubernamental se echa la culpa de la crisis al anterior gobierno, conducido por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, por no recapitalizar a las entidades financieras desde 2009 como se hizo en otros países.
"Como teníamos el mejor sistema financiero del mundo, no se hizo, y vamos con tres años de retraso respecto de los demás", dijo Rajoy, con un sentido de ironía contra el hoy opositor Partido Socialista Obrero Español.
Con ese argumento, el gobernante propuso crear una autoridad fiscal europea que permita controlar las finanzas de manera centralizada y que gestione las deudas de la región.
La asistencia de la UE en créditos para España apunta, según expertos, a salvar el euro, en riesgo desde que estalló la crisis en Grecia, donde el 17 de este mes se realizarán nuevas elecciones para tratar de conformar gobierno.
