La entidad ambientalista Greenpeace de Argentina denunció la presunta deforestación de un área de bosque restringida para la tala en la nororiental provincia de Chaco. “Es un desmonte encubierto”, dijo a Tierramérica el ambientalista Hernán Giardini, de Greenpeace. “Dejan unos pocos árboles aislados y arrasan con el sotobosque, donde se alimenta la fauna, con la idea de duplicar el stock ganadero para 2015”, denunció.
Una ley de bosques sancionada en 2007 dispone la ejecución de un ordenamiento territorial para los bosques de cada provincia. Chaco lo hizo en 2009 y estableció áreas en las que solo se permite una actividad sustentable.
Una de esas zonas está sometida supuestamente a la tala para hacer espacio a la ganadería intensiva, según Greenpeace.