Hacer algunos cambios básicos en las políticas educativas puede lograr que muchas más niñas asistan a la escuela, según expertos reunidos con motivo del Día Mundial de los Docentes, que en su edición de este miércoles busca promover la igualdad de género.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Kenia es un ejemplo de país que logró enormes avances hacia el objetivo de la educación universal al incorporar la conciencia de género en la administración escolar.
"Ofrecimos almuerzos gratuitos, pero además nos aseguramos de que en las escuelas hubiera toallas higiénicas disponibles, y eso redujo enormemente el ausentismo", dijo a IPS el ministro de Educación de Kenia, Sam Ongeri.
"Alimentar a los estudiantes es una cosa, pero cuando se hace que las niñas se sientan cómodas y potenciadas en la escuela, eso marca una gran diferencia", señaló en una entrevista realizada en el marco del foro de alto nivel organizado los días 3 y 4 de este mes en el Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
En la última década, Kenia y muchos otros países progresaron en la reducción de las brechas de género en materia educativa, según la Unesco.
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Pero en algunas regiones, las niñas todavía quedan rezagadas en cuanto a las oportunidades educativas, señaló esa agencia en un informe, agregando que "nacer niña conlleva una significativa desventaja educativa en muchos países".
Según la Unesco, demasiados gobiernos avanzan demasiado lentamente en la eliminación de las brechas de género, y 69 no logran la paridad de género en las inscripciones a la escuela primaria. Esto se traduce en que 3,6 millones de niñas no cursan la enseñanza primaria, planteó.
En términos generales, hay unos 67 millones de niños que no van a la escuela. De ellos, más de 50 por ciento son niñas. Además de la pobreza y los conflictos, a menudo las normas sociales y culturales son culpables de la marginación de las niñas en algunas áreas. Pero esto último es un tema delicado en las organizaciones gubernamentales internacionales.
La ONU viene trabajando para crear lugares "no tradicionales" de aprendizaje para el público femenino, "especialmente para niñas analfabetas o que desertaron de la escuela" en países como Afganistán y Pakistán, dijo a IPS la directora general de la Unesco, Irina Bokova.
"A veces también usamos escuelas móviles para poblaciones nómades. Con estas medidas, podemos llegar a cientos de miles de mujeres", agregó.
Según ella, es importante que la Unesco "aliente a los gobiernos" a volver una prioridad la educación de las niñas en sus políticas nacionales, pero al mismo tiempo ser "creativos", especialmente ayudando a quienes abandonan sus estudios.
"Brindar educación a quienes desertan es el mayor desafío", dijo Bokova a IPS.
Actualmente, dos tercios de los 796 millones de adultos analfabetos son mujeres, indican cifras de la ONU.
Quienes participaron en la conferencia también señalaron que la educación debe ser una fuente de empoderamiento de género, transformando la mentalidad de niñas y varones a medida que se logra la igualdad.
"Para cambiar la sociedad, los individuos no solo deben aprender disciplinas académicas básicas, sino que deben desarrollar un sentido de valor en relación a sí mismos, sentir que pertenecen a una sociedad dada, y aprender a defenderse de amenazas y desafíos", dijo Nelly Stromquist, profesora de políticas educativas internacionales en la estadounidense Universidad de Maryland.
Ella y otros expertos afirmaron que los gobiernos necesitan garantizar que las niñas se sientan seguras en la escuela, además de brindar acceso a agua limpia y a instalaciones como letrinas. Esto último es "muy importante para las adolescentes", enfatizó Stromquist.
Alice Kagoda, profesora en la Universidad Makerere de Uganda, sostuvo que a menudo las niñas son acosadas en el camino a la escuela y también dentro de esos centros de estudios, y que es importante que se les enseñe cómo afrontar estas situaciones.
"La niña de comunidades más pobres en África enfrenta desafíos ya desde su casa, lo que va desde ir a buscar agua hasta ir a buscar leña", explicó a IPS.
"En las sociedades rurales también van a la escuela caminando, y las propias niñas dicen que en todos estos procesos son acosadas", agregó.
Dentro de la escuela, a veces corren el riesgo de ser acosadas por los maestros, dijo Kagoda. Y en sus hogares a menudo no tienen tiempo para hacer los deberes porque están ocupadas con las tareas domésticas.
"Estás cansada, te acosan. No tienes vestimenta adecuada y no asistes a clases cuando estás menstruando. Así que ¿cómo puede ser tu desempeño?", planteó Kagoda.
"Hay muchos problemas que no permiten que las niñas pobres estudien", añadió.
Según ella, los hombres que administran las escuelas no pudieron ver o comprender plenamente estos problemas específicos del género, así que es imperativo que los gobiernos se aseguren de que haya suficiente personal docente femenino, también en cargos de dirección.
Los expertos reunidos en la conferencia dijeron que la presencia mundial de mujeres como profesoras "se reduce a medida que aumenta el grado" jerárquico. En Liberia un caso "extremo", según un orador-, 93 por ciento de los directores son hombres.
"Tenemos que ser realistas. Muchos países están dispuestos a cambiar pero no saben bien qué hacer, o cómo abordar el tema", dijo Khalil Mahshi, director del Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación.
"Esta es una oportunidad de compartir investigaciones y unir nuestras experiencias para que podamos ayudar a los gobiernos a mejorar la inclusión de las mujeres en puestos de liderazgo", declaró a IPS.
"Tenemos que seguir defendiendo y alentando el cambio", añadió.
Entre los Objetivos de Desarrollo de la ONU para el Milenio figura la ambiciosa meta de lograr la igualdad de género en la educación para 2015, y los funcionarios señalan que esto incluye la situación de los varones, que presentan una mayor deserción en regiones como América Latina y el Caribe.
"Cuando quedan apenas cuatro años para lograr los Objetivos, necesitamos volver a comprometernos y acelerar nuestros esfuerzos para reducir la brecha de género y garantizar que todos los niños completen la escuela primaria, y que niñas y varones tengan un acceso igualitario a una educación gratuita y de calidad", dijo Cheryl Gregory Faye, titular de la Iniciativa de las Naciones Unidas para la Educación de las Niñas.