El parlamento de Honduras autorizó el 12 de abril la creación de un contingente de 2.000 efectivos militares especializados en el control y combate de incendios forestales. Estas tropas se sumarán a otras tantas que integran los “batallones verdes”, a los que el Estado otorga un presupuesto anual de 3,6 millones de dólares.
El país se encuentra al borde de una emergencia forestal, “porque más de 17.000 hectáreas de bosque han sido quemadas en lo que va del año, y los militares no se dan abasto para la protección”, dijo a Tierramérica el diputado Augusto Cruz Asencio.
Por cada hectárea de bosque que se quema, el país pierde algo más de 700 dólares. Los alrededores de Tegucigalpa, el norteño departamento de Yoro, el sureño de El Paraíso y el central valle de Comayagua son las zonas más afectadas.