Investigadores de la brasileña Universidad Estadual de São Paulo crearon un nuevo plástico ideal para automóviles, aprovechando fibras vegetales en nanotecnología. “La nanocelulosa es una fibra extremadamente pequeña, liberada a partir de un procesamiento intenso de la celulosa, material básico que compone la madera y otras partes de las plantas. Los mejores resultados los obtuvimos de la piña (ananá) y del banano”, explicó a Tierramérica el investigador Alcides Leão, de la Universidad Estadual de São Paulo.
El nuevo súper plástico es 30 por ciento más ligero y cuatro veces más fuerte que el desarrollado por la petroquímica, excelente para componer partes de vehículos como parachoques y paneles. Además sustituye materiales no renovables y contaminantes como los derivados del petróleo.
“El sistema de producción es más caro, pero la materia prima más barata lo hace económicamente viable. Creo que en dos años este plástico estará en el mercado”, agregó Leão.