Mujeres de Bahrein se proponen calmar las tensiones sectarias que surgieron en este país del Golfo a raíz de los reclamos políticos que comenzaron el 14 de febrero mediante nuevas iniciativas.
La mayoría chiita y la minoría sunita solían convivir sin problemas en el pequeño reino insular, cuyas ganancias por el petróleo representan 70 por ciento de los ingresos del Estado.
Inspirada por los movimientos populares en Egipto y Túnez, la oposición bahreiní comenzó a protestar en reclamo de una reforma constitucional y el fin de lo que considera una sistemática discriminación contra la población chiita.
La familia real sunita actuó rápidamente y reprimió las protestas.
La mayoría de los manifestantes que participaron en las protestas antes de que las autoridades decretaran en marzo tres meses de Estado de emergencia eran chiitas. Los sunitas realizaron manifestaciones favorables al gobierno.
[related_articles]
Las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes el 16 de febrero, matando a por lo menos tres personas e hiriendo a decenas más, pero no lograron calmar las protestas.
Un mes después, cuando el Consejo de Cooperación del Golfo aprobó el envío de un contingente de 1.000 efectivos para apoyar al gobierno de Bahrein, el rey Hamad bin Isa Al Jalifa no perdió tiempo y despejó la plaza Pearl.
Cientos de personas resultaron heridas en el caos. La policía disparó a los manifestantes con gases lacrimógenos, perdigones, balas de goma y reales.
Chiitas y sunitas divulgaron listas de comercios para boicotear sólo porque el dueño pertenece a otra corriente del Islam. Los nombres se distribuyen en panfletos, correo electrónico y foros de Internet.
"Mujeres por Bahrein" se propone volver a unir a los bahreníes. "Tratamos de explicar que la religión es para Dios y el país para nosotros, y que el sectarismo puede causar graves complicaciones", dijo a IPS la activista Fawziya al Jaja, también integrante del comité de medios.
La flamante organización, que reúne a personas de todas las profesiones y condiciones sociales, se opone a dirigentes que apoyan las tensiones sectarias con el fin de promover su agenda política, explicó.
La organización comenzó sus actividades en marzo haciendo un llamado al amor y a la tolerancia a través de las redes sociales de Internet y reclamó la unidad.
"Las actividades de la organización no tienen un plazo y seguirán mientras sea necesario. Queremos que la población de Bahrein se acepte y se respete sin importar sus diferencias y que comparta el amor por su país", señaló Al Jaja.
La organización promueve los principios de sabiduría, justicia y libertad para proteger la dignidad de las personas. "Le decimos a la sociedad y al mundo que no se debe pasar por alto el papel de las bahreiníes porque sin ellas la estructura de la familia y de la comunidad se ve afectada", explicó.
Las redes sociales y las tecnologías de comunicación se convirtieron en armas de guerra entre jóvenes chiitas y sunitas que se pasan mensajes de odio. El contenido se concentra en criticar las diferencias entre ambas corrientes del Islam, dijo a IPS la presidente de la Unión de Mujeres de Bahrein, Mariam al Ruwai.
"Los matrimonies mixtos son los que más sienten el fragor de la tensión, pues la gente podrá rechazar el sectarismo dentro de sus hogares, pero lo confrontamos en nuestras camas", dijo a IPS la chiita Fathiya Ibrahim, casada con un sunita.
"No nos sentimos cómodos porque tenemos distintas opiniones. Antes no era así, pero la situación nos llevó a esto", señaló Fathiya.
Haisa al Junadi, sunita y casada con un chiita, logró atraer a 40 mujeres para oponerse contra la situación que amenaza la estabilidad de sus familias y la seguridad de sus hijos, pues los enfrentamientos se tornan violentos en las escuelas.
"Queremos tomar medidas legales, como demandar a dirigentes políticos que promuevan el sectarismo", anunció Haisa en el lanzamiento de la iniciativa que organizó en su propia casa.
"A través de la organización queremos poner de manifiesto que nos duele la desunión de la comunidad y la alteración de las relaciones", remarcó.