Una neblina con partículas de basura planea este mes sobre Ciudad Guayana, situada 600 kilómetros al sudeste de Caracas. La urbe tiene casi un millón de habitantes y es asiento de las industrias de hierro, acero, aluminio e hidroelectricidad de Venezuela.
«La principal causa es que el relleno sanitario de Cambalache desde hace años es usado como simple vertedero de desechos sólidos, a los que por desidia se les prende fuego y se genera la nube tóxica que enferma a los guayaneses», dijo a Tierramérica el abogado y activista comunitario Eliécer Calzadilla.
Diego Díaz, de la organización ambientalista Vitalis, recordó a Tierramérica que el «inapropiado manejo de los desechos sólidos urbanos» encabeza la lista de problemas ambientales que desde hace años conforma su organización con base en consultas a expertos y activistas.
Sólo uno de los 150 rellenos existentes cumple con disposiciones ambientales y sanitarias pautadas por la legislación venezolana.