La escasez de semillas y plántulas de especies nativas traba los planes de Brasil de plantar 20.000 millones de árboles en los próximos cinco años. La “Operación Arco Verde”, por sí sola, exige 200 millones de plántulas anuales, señaló José Neumar Francelino, coordinador del sector en el Ministerio de Agricultura, refiriéndose al programa de reforestación de áreas devastadas en la Amazonia, promovido en alianza con gobiernos de estados y municipios.
La actual estructura de producción tiene capacidad para sólo 15 millones de árboles al año, según datos de la Asociación Brasileña de Semillas y Plántulas.
La estatal Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria “realiza un diagnóstico de la situación, y con datos consolidados podremos diseñar estrategias para el futuro”, dijo Francelino a Tierramérica.
No se piensa en especies exóticas, porque “no tenemos estudios sobre las consecuencias de su introducción en nuestros ecosistemas”, acotó.