DESARME: Obama avanza en su agenda antinuclear

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, relacionó los compromisos sobre la seguridad de delicados materiales fisibles al objetivo mayor de su plan de crear un «mundo sin armas nucleares» en la cumbre realizada esta semana en Washington.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, habla en la Cumbre de Seguridad Nacional. Crédito: Eli Clifton/IPS.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, habla en la Cumbre de Seguridad Nacional. Crédito: Eli Clifton/IPS.
"Forma parte de una política más amplia de Estados Unidos, que apunta a reducir nuestro arsenal y a frenar la proliferación de armas atómicas. La estrategia nos acercará al objetivo máximo de tener un mundo sin armas nucleares", declaró Obama el martes de mañana ante los participantes de los 47 países representados.

Estados Unidos trabajará con otros estados para ayudarlos a garantizar la seguridad de sus materiales fisibles y evitar el contrabando, un fin que comparten todos los países presentes, señaló al término del encuentro de dos días.

La cumbre es uno de los mejores ejemplos del nuevo enfoque multilateral de Washington en materia de política exterior y un importante paso hacia los ambiciosos objetivos propuestos por Obama hace un año.

"Creo que esta es una gran oportunidad. Me impresionó que hayan dicho que lo iban a hacer y que lo estén haciendo", dijo a IPS Steve Clemons, director del programa de estrategia estadounidense, de la New America Foundation.
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El objetivo específico de la cumbre, realizada lunes y martes, fue discutir cómo impedir que materiales fisibles caigan en manos de organizaciones terroristas, pero en las semanas previas la Casa Blanca intensificó los esfuerzos para promover su objetivo de un mundo sin armas nucleares.

Obama y el presidente de Rusia, Dimitri Medvédev, suscribieron el jueves de la semana pasada un nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (Start, por sus siglas en inglés) en Praga.

El día anterior, Obama divulgó la nueva versión del documento Revisión de la Política Nuclear, que prohíbe a este país usar armas atómicas contra países signatarios que respeten el Tratado de No Proliferación Nuclear (TPN), renuncia a los ensayos y a la fabricación de nuevas ojivas y obliga a Washington a tratar de que el Senado ratifique el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares para su entrada en vigor.

En mayo se realizará la conferencia para revisar el TPN en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York.

"Hay una nueva versión de la Revisión de la Política Nuclear, lo que es productivo, y luego el Start, que una semana antes no estaba asegurado. Luego vino la cumbre de seguridad. Creo que todo conduce a la conferencia de mayo. Son unas semanas extraordinarias donde la atención pública se concentra en la no proliferación", señaló Clemons.

"El presidente es un hombre muy serio, como persona y como dirigente de Estados Unidos, en lo que respecta a las obligaciones dispuestas por el TPN. Con el gobierno de Obama, Estados Unidos hace su parte", dijo a IPS Bruce Blair, cofundador y uno de los coordinadores de Global Zero, iniciativa internacional que aboga por la eliminación del armamento atómico.

"Negociamos la reducción de arsenales e incluso mantenemos un diálogo al respecto con países como China y, hasta trabajamos por una reconciliación. Es una buena oportunidad para que los países signatarios del TPN, que poseen la tecnología, negocien de buena fe la reducción de su armamento", señaló.

La cumbre, que terminó el martes, logró que los 47 países representados asumieran varios objetivos clave.

Los compromisos alcanzados incluyen esfuerzos para fortalecer organizaciones internacionales como la ONU y la Agencia Internacional de Energía Atómica, así como una plataforma de acuerdos bilaterales.

El más importante de los pactos fue el que sellaron Estados Unidos y Rusia para deshacerse de por lo menos 34 toneladas de plutonio enriquecido, cada uno, suficiente para fabricar 17.000 bombas atómicas, según la secretaria de Estado (canciller) estadounidense Hillary Rodham Clinton.

Obama y el primer ministro de China, Hu Jintao, se reunieron el lunes y discutieron aumentar las sanciones a Irán, por sospechar que tiene un programa para desarrollar armas nucleares. Beijing tiene grandes relaciones comerciales con la República Islámica.

Kazajstán accedió a convertir un reactor de investigaciones de uranio enriquecido y a eliminar todo el material que ya tiene producido. Ucrania también se comprometió a descartar el suyo para la próxima cumbre, que se realizará en Corea del Sur en 2012.

Estados Unidos se propuso reforzar su nueva política multilateral con los miembros del llamado Movimiento de Países No Alineados. El vicepresidente Joe Biden organizó el lunes un almuerzo en su casa con representantes de 11 países: Arabia Saudita, Argelia, Chile, Egipto, Indonesia, Malasia, Marruecos, Nigeria, Sudáfrica, Tailandia y Vietnam.

Ahora resta ver si los compromisos contraídos se cumplen, remarcaron numerosos especialistas.

"Creemos que la cumbre es un avance concreto para eliminar el arsenal atómico", dijo a IPS Cara Bautista, coordinadora de la Campaña para un Mundo Libre de Armas Nucleares. "Ahora que los países fijaron sus compromisos veremos si los cumplen", apuntó.

"En Estados Unidos esperamos que el Senado ratifique el nuevo Start y que haya más fondos para programas que garanticen la seguridad de los materiales fisibles en el mundo", añadió.

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