Más de una muerta cada día, en crímenes que no hallan justicia, llevó a ocho organizaciones feministas de Honduras a crear la Tribuna de Mujeres contra los Femicidios, para impulsar una campaña que frene la plaga y la impunidad que la envuelve.
Honduras pasó del tercero al segundo lugar de América Central en femicidios, detrás de Guatemala y delante de El Salvador, después de que en 2009 se produjeron 377 asesinatos de mujeres y en los dos primeros meses de este año 60, según registros del estatal Instituto Nacional de la Mujer (INAM), que la nueva Tribuna considera parciales.
Gladys Lanza, coordinadora nacional del Movimiento de Mujeres por la Paz "Visitación Padilla", dijo a IPS que "nos están matando, nadie reacciona y nosotras estamos indignadas ante tanta impunidad".
Esta organización es una de las ocho de la Tribuna, conformada el día 10 y que acaba de lanzar la Campaña Nacional Contra los Femicidios, con el apoyo especial de Oxfam Internacional.
En los últimos seis años fueron asesinadas más de 1.200 mujeres en este país centroamericano, y sólo 54 casos llegaron a los tribunales. Las muertes violentas de mujeres aumentaron a una tasa de 160 por ciento, mientras que las de varones lo hicieron en 50 por ciento, se explicó en el lanzamiento de la campaña.
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La ministra del INAM, María Antonieta Votto, declaró a IPS que es su intención unir esfuerzos con las organizaciones feministas para promover "la concienciación para que este delito no quede impune y se empolve en el silencio de los archivos".
El grado de violencia con que comenzó 2010 "nos alarma, porque parece que esta ola de asesinatos no va a tener fin y nadie dice qué pasó, por qué las matan y que están haciendo para que el delito no quede impune", planteó la responsable de los asuntos de la mujer desde el 27 de enero, cuando tomó posesión el presidente derechista Porfirio Lobo.
Esa alarma también condujo a la Fiscalía Especial de la Mujer y al Fondo de Población de las Naciones Unidas a establecer un plan de seminarios por departamentos del país, para sensibilizar a los operadores de justicia sobre la violencia de género y capacitarlos sobre la Ley de Violencia Doméstica y las mejores formas de aplicarla.
En uno de estos seminarios, el día 15 en San Pedro de Sula, la capital industrial del país situada a 244 kilómetros al norte de Tegucigalpa, algunos jueces lamentaron la poca ayuda que reciben de la policía para que se hagan efectivas medidas contra los maltratadores de sus parejas o ex parejas, contempladas en la ley.
Esa ciudad es la que tiene mayores índices de violencia sexista. De los 377 femicidios denunciados el año pasado, 156 ocurrieron allí, mientras en Tegucigalpa hubo 145.
El lanzamiento de la campaña contra el femicidio se integró en una cadena de acciones del movimiento organizado de mujeres hondureñas.
El Día Internacional de la Mujer, el 8, y las jornadas previas, las organizaciones feministas realizaron movilizaciones y protestas pacíficas ante el parlamento, otras instituciones y las iglesias de diferentes ciudades, en las que portaron una cruz como estandarte.
"Un símbolo de nuestras mujeres asesinadas y por las que nadie da respuestas", dijo Lanza.
Las organizaciones feministas criticaron que el nuevo gobierno haya presentado "un plan de la nación donde no se contempla el eje de género, no se mencionan los derechos de las mujeres y tampoco la problemática de los femicidios".
Honduras, con 7,5 millones de habitantes de los que 51,7 por ciento son mujeres, está sumergida en una creciente inseguridad ciudadana que ha situado en 14 el promedio diario de homicidios.
Pero el Observatorio de la Violencia de la estatal Universidad Nacional Autónoma de Honduras, destaca que los femicidios provocan un especial impacto, por la situación de indefensión, la saña y la impunidad, dijo a IPS su rectora, Julieta Castellanos, especialista en temas de seguridad.
El Observatorio tipifica los femicidios como "asesinatos de odio" contra las mujeres, mientras que la Tribuna precisa más la tipificación del delito, al establecer que es la muerte de mujeres por violencia de género, perpetrada por parejas, ex parejas, u otros relacionados o desconocidos.
Un estudio de la Tribuna indica que cinco de cada 100.000 hondureñas mueren asesinadas. En 77,8 por ciento de los casos el agresor fue declarado como desconocido, pese a que se ha podido establecer que en 52,5 por ciento de las muertes el victimario era pareja de la asesinada.
Dulce Ulloa, responsable de la Organización Las Hormigas, precisó que la campaña busca crear conciencia y presionar al Estado para que comprenda que "aparte de maltratarnos nos están matando indiscriminadamente" y que es urgente que todos los organismos de seguridad y justicia comiencen a combatir la violencia intrafamiliar.
En un comunicado, Oxfam precisó que la campaña contra los femicidios no se va a limitar al ámbito nacional, sino que presionará desde instancias foráneas para que las autoridades hondureñas cumplan tratados y acuerdos internacionales, que las obligan a prevenir y erradicar estos crímenes.