La firme posición de la saharaui Aminatou Haidar, en huelga de hambre desde hace dos semanas en un aeropuerto de las Islas Canarias, contrasta con la débil posición del gobierno de España ante el marroquí, al que no exige que resuelva el problema y le permita a la activista volver a su domicilio en el Sahara Occidental.
El delegado del Frente Polisario de Liberación (FPL) en España, Mohamed Jadad, dijo a IPS que el gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero debe presionar a las autoridades de Marruecos "para que Aminatu pueda regresar a su casa en El Aaiún, con su familia y sus hijos".
El Aiún es la capital del Sahara Occidental, región controlada por Marruecos y por cuya independencia lucha el FPL, cuyo nombre completo es Frente Popular de Liberación de Saguia al Hamra y Río de Oro.
Jadad añadió que el gobierno español no se arriesga a contrariar a Marruecos y "hace la vista gorda ante la violación de los derechos humanos y el rechazo de ese país al Plan 1991 y al B 2003 de (la Organización de) las Naciones Unidas (ONU)".
Haidar, conocida como la Mahatma Gandhi saharaui, de 42 años, por defender el derecho a la autodeterminación de su pueblo estuvo presa en cárceles marroquíes, en las que fue torturada.
A mediados de noviembre regresó de un viaje de un mes de duración, tras pasar por Estados Unidos, donde recibió el 21 de octubre el premio al Coraje Civil otorgado por Train Foundation, de Nueva York. En 2008 también recibió el galardón a la Defensa de los Derechos Humanos de parte de la Fundación Robert F Kennedy.
A su regreso, el día 14, el gobierno marroquí le impidió ingresar a El Aaiún, le quitó su pasaporte y la envió de vuelta a la localidad española de Lanzarote, en las Islas Canarias, ubicadas en el océano Atlántico cerca de la costa de Marruecos.
La activista permanece en ese lugar, desde entonces, en una huelga de hambre reclamando que le sea devuelto su pasaporte y pueda regresar a El Aaiún.
El canciller de España, Miguel Ángel Moratinos, tras varios cambios de posiciones, este martes subrayó que se mantiene en contacto con las autoridades marroquíes, a las que planteó que envíen a Haidar un pasaporte, "sea el anterior o uno nuevo", sin que hasta el momento haya recibido respuesta.
Días antes Moratinos había planteado que una solución al problema era conceder a Haidar el estatuto de refugiada o, incluso, de otorgarle la nacionalidad española, con los respectivos documentos. Pero la independentista rechazó esas posibilidades, porque ninguna de ellas le garantizaría su regreso a El Aaiún y sigue manteniendo su huelga de hambre.
La actitud de Haidar fue duramente criticada por Gustavo de Arístegui, portavoz de asuntos exteriores del centroderechista Partido Popular, la principal fuerza de oposición.
De Arístegui dijo que con su huelga ella, "con una posición numantina (terca)", "lo único que hace es enmarañar, enturbiar y enredar las negociaciones" sobre el Sahara Occidental. Unas negociaciones que están dormidas, en incumplimiento de lo acordado por la ONU en 1991 y 2003.
En 1991 se designa al estadounidense James Baker enviado especial de la ONU para el referéndum en el Sahara Occidental y buscar así una salida pacífica. Logra del FPL y del gobierno de Marruecos un cese del fuego, que se mantiene hasta la actualidad.
En 2003 la ONU aprobó la resolución 1495, conocida como Plan Baker II, que preveía la realización de un censo en el territorio en disputa, donde el FPL creó la República Árabe Saharaui Democrática.
El diplomático del Partido Popular aprovechó la ocasión para criticar a los artistas que apoyan a Haidar, a los que preferiría ver movilizándose por otras causas y no por ésta, "que les da una imagen de mayor progresía o visibilidad", puntualizó.
Las personalidades del mundo del arte a las que se refirió De Aristegui celebraron un acto el 14 de este mes y entre otros estuvieron los cantantes Macaco, de Barcelona, Juan Diego Botto, Carmen París y María Hassan, la actriz Pilar Bardem y el director de cine Pedro Almodóvar.
Bardem pidió al rey Juan Carlos que intervenga para solucionar la situación, a la vez que reclamó que se concrete de una vez la celebración del referéndum por la autonomía saharaui.
La secretaria de organización del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Leire Pajín, destacó que Haidar está en España en contra de su voluntad y que ella lo que reclama es regresar a su casa con su madre y sus hijos.
Por ello pidió a Marruecos que ayude a desbloquear de inmediato esta situación, ya que la expulsión de la saharaui "vulnera el pacto internacional de derechos civiles y políticos de la ONU que Marruecos también ha firmado".
María José Fernández, de la Asociación Asturiana de Amigos del Sahara, viajó el fin de semana a Lanzarote donde visitó a Haidar, a quien vio muy debilitada, desvaneciéndose a veces y siempre ayudada por terceros para levantarse e ir al baño.
Pero, agregó, que pese a la debilidad provocada por la huelga está lúcida y fuerte de espíritu, leyendo toda la prensa y atendiendo a quienes van a hablar con ella. A este respecto le dijo que "no quiere hablar más por teléfono con Moratinos, que si el ministro quiere conversar con ella que venga hasta aquí".
Moratinos lo que ha hecho es enviar a uno de sus funcionarios, este martes.
El coordinador de la opositora coalición de Izquierda Unida, Cayo Lara, criticó la posición gubernamental y reclamó que se respete la voluntad de Haidar de regresar con su familia y que deje de "ser cómplice" de la "ilegalidad" que Marruecos está perpetrando con la activista.
Haidar, en declaraciones al madrileño diario El País, también lo considera así. "Desde el primer momento observé que había una complicidad de los gobiernos español y marroquí, y que mi traslado a España era un tema político", indicó.
"El gobierno español tiene que rectificar esta violación flagrante de los derechos humanos, de la ley española y de los convenios internacionales", añadió.
En un comunicado precisó que son sus convicciones y su conciencia las que le indican lo que debe hacer y no quienes la apoyan o rechazan, "ni el Frente Polisario, ni Marruecos, ni Estados Unidos, ni Moratinos, ni nadie".
El secretario de Movimientos Sociales y Relaciones con las Organizaciones no Gubernamentales del PSOE, Pedro Zerolo, y el director del gabinete del Canciller, Agustín Santos, dialogaron con Haidar este martes. A la única conclusión a la que llegaron, dijo Santos al finalizar su reunión con la saharaui, fue que las gestiones con Marruecos deben continuar.
Algo que no influye en los hechos pero que llama la atención es que la jueza Ángela López haya multado a Haidar con 180 euros (370 dólares) por "desorden público", como calificó a su huelga de hambre.
