El municipio chileno de Tierra Amarilla, 805 kilómetros al norte de Santiago, presentó numerosas observaciones al proyecto de cobre Caserones, de la empresa japonesa Lumina Copper, en proceso de evaluación de impacto ambiental. Es la primera vez que las autoridades de esa comuna minera participan de la tramitación ambiental de un yacimiento, explicó a Tierramérica el ingeniero ambiental y asesor del municipio, Manuel Pizarro.
El municipio pide que se construya una planta desalinizadora de agua por el estrés hídrico que sufre la región, que se amplíe el área de influencia del proyecto a más comunidades y que se reconozca su impacto en términos de empleo, entre otras cosas.
El proyecto, que cuesta 1.700 millones de dólares y cuya evaluación finalizará el 30 de julio, también ha sido cuestionado por los servicios públicos.