Perú y China se encuentran en el proceso de revisión jurídica de un Tratado de Libre Comercio (TLC) que acaban de acordar, como antesala a la cumbre del APEC, que se celebra este sábado y domingo en Lima.
"El TLC con China ya se terminó de negociar, falta lo que llamamos la revisión legal, se ha hecho en tres idiomas (español, chino e inglés) y cada mes ha tenido un capítulo. Ahora hay que hacer que todos los capítulos sean ordenados numéricamente, que tengan coherencia, las mismas palabras, es la coherencia de un contrato", dijo este viernes la ministra de Comercio Exterior de Perú, Mercedes Aráoz.
Perú mantendrá vigente su protección arancelaria ante los productos textiles y de confecciones procedentes de China, así como las herramientas de lucha contra el dumping, aseguró la ministra.
"Hemos conseguido que se excluya, como en ningún otro acuerdo, el 10 por ciento de nuestro comercio, se han excluido las partidas más sensibles todas las que son de textiles y confecciones. No vamos a bajar el arancel a los productos (textiles y confecciones) chinos", subrayó.
También recordó la firma de un acuerdo de cooperación aduanera con Beijing, para el intercambio de información que permita evitar problemas de subvaluación y detectar casos de defraudación.
[related_articles]
Tras la revisión jurídica, el texto del TLC deberá ser sometido al Congreso legislativo, pero ya generó incertidumbre y rechazo de algunos sectores.
"Esperamos que las dos partes suscriban cuando antes y pongan activamente en marcha dicho acuerdo para que nuestros pueblos sean beneficiados muy pronto", manifestó el jueves el presidente de China, Hu Jintao, durante una reunión de trabajo en Lima con empresarios de su país y de Perú.
Jintao, quien llegó por primera vez al país en visita oficial y para participar en la XVI Reunión de Líderes del APEC (Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico), animó a los inversionistas de su país a apostar por Perú ante el aplauso de su homólogo Alan García, tras anunciar la noche del miércoles el término de las negociaciones para el TLC.
La sonrisa de los mandatarios contrastó con el descontento de un sector de empresarios nacionales.
"El acuerdo comercial con China no debe firmarse en forma apresurada porque primero deberíamos tener claro sus beneficios y a nosotros no nos han informado nada. Las autoridades han manejado las negociaciones como un secreto de Estado", dijo a IPS el director de la Unión de Empresarios Textiles (Unete), Pedro Manzur.
El sector textil será el más afectado por las importaciones chinas que han perjudicado a los empresarios nacionales por sus productos de bajo costo, dijo.
Ochenta y seis por ciento de las importaciones textiles que llegan a Perú provienen de China, que beneficia al sector hasta con 63 subsidios, según Manzur.
"Mientras nosotros tenemos un subsidio de sólo cinco por ciento, ellos tienen 14 por ciento y una serie de incentivos que nos ponen en total desventaja", agregó.
Los sectores más vulnerables, además del textil, son las manufacturas y la metalmecánica, porque los precios chinos son extremadamente bajos.
Las negociaciones empezaron a mediados del año pasado y se liquidaron en apenas seis rondas.
La desconfianza es tal que el miércoles un grupo de pequeños comerciantes de textiles agredieron verbalmente al millonario empresario chino Jack Ma, cuando éste visitaba el emporio comercial de Gamarra en el distrito limeño de La Victoria.
Jack Ma consiguió el éxito con su promocionado portal de Internet alibaba.com que sirve de herramienta para que las pequeñas y medianas empresas (PYME) compren insumos y vendan productos. Llegó a Lima para participar en la II Cumbre PYME de APEC.
"Creo que los sueños de las PYME son los sueños del mundo", dijo Ma, de 43 años, en una entrevista ofrecida al diario Perú 21 tras soportar los incidentes en Gamarra.
"La negociación no ha sido transparente, eso es un escándalo", dijo a IPS el economista Humberto Campodónico, columnista del diario La República.
Este acuerdo sólo será la continuación de la inundación ya consumada de inversiones chinas, y el mayor problema se debe a la política económica peruana, que ha optado por liberalizar todo y bajar los aranceles en perjuicio de la producción nacional, opinó.
"Los chinos defienden a morir sus productos, pero nosotros nos liberalizamos sin que nadie nos lo pida, lo cual hace más desventajosa la negociación comercial con otros países", aseguró Campodónico.
García negó que los intereses del sector manufacturero chino sean incompatibles con el peruano porque las empresas asiáticas podrían establecerse en este país y aprovechar así las ventajas abiertas a Perú mediante el TLC con Estados Unidos.
"Nos interesa porque utilizaría el algodón y mano de obra peruana y contribuiría a renovar nuestras tecnologías textiles", dijo García el jueves ante Hu. Los empresarios chinos podrían utilizar Perú como plataforma para ingresar con neumáticos a los mercados norteamericano y sudamericano, agregó.
García instó a invertir no sólo en la pródiga minería peruana sino en rubros como construcción, ferroviario, industria y finanzas.
Según cifras oficiales, en 2007 la balanza comercial bilateral fue favorable a Perú. Las exportaciones al país asiático sumaron algo más de 3.000 millones de dólares, con las importaciones en 2.300 millones de dólares.
El titular del parlamento, Javier Velásquez, estimó que la aprobación del TLC está asegurada.
Pero el empresario Manzur opinó que a este país no le conviene ese acuerdo, porque China no cumple los requisitos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) al no respetar derechos laborales, ni medidas de protección al ambiente.
En una posición intermedia, el director ejecutivo del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Lima, César Peñaranda, dijo que el TLC es un paso positivo porque el país asiático representa un mercado de 1.300 millones de personas, un reto para los peruanos que viven de la exportación.
"Lo importante es capitalizar los beneficios y minimizar los costos. Pero se ha avanzado muy lentamente en incrementar la productividad que depende de una reforma del Estado, tributaria, de infraestructura y la descentralización productiva", señaló Peñaranda a IPS.
Para el experto, lo importante sería saber qué productos están considerados dentro del acuerdo comercial, y cuáles no. "Falta conocer los alcances", agregó.
El jueves llegó a Lima el presidente de Corea del Sur, Lee Myung-bak, en visita oficial y para participar de la Cumbre de Líderes de APEC.
Según el canciller peruano José Antonio García Belaúnde, Perú y Corea del Sur iniciarán negociaciones para un TLC.
Este viernes llega el presidente saliente de Estados Unidos, George W. Bush, quien se reuniría el domingo con García. Su presencia será motivo de protestas de organizaciones sociales y sindicales.
"El objetivo es efectuar un foro político y cultural en que se señalará la culpabilidad de Bush en crímenes de lesa humanidad, por su política guerrerista y de intromisión en la política de los países del Tercer Mundo", dijo Mario Huamán, secretario general de la Confederación General de Trabajadores del Perú.
En total, llegarán a la capital peruana 19 jefes de Estado de las 21 economías que forman parte del APEC, los que suscribirán este domingo la Declaración de Lima.
El jueves los ministros de Relaciones Exteriores y Comercio de APEC concluyeron sus reuniones y recomendaron apoyar la Declaración de Washington, acordada este mes por el Grupo de los 20 (G-20) países financieros, y evitar "barreras al comercio y a las inversiones" para capear la crisis actual.
Las economías de APEC suman 56 por ciento del producto bruto mundial y 46 por ciento del comercio internacional. Sólo tres países de América Latina forman parte de este foro, Chile, Perú y México.