El gobierno de Brasil anunció la creación de un sitio de Internet para centralizar todas las denuncias sobre pornografía infantil en ese medio, un paso para combatir este delito que, según organismos de derechos humanos, crece en el mundo junto a otros como el tráfico de menores y el turismo sexual.
La llamada "línea directa entre los ciudadanos", a la que se accederá desde el sitio Denunciar.org, fue creada por el gobierno junto con la Policía Federal y la no gubernamental Safernet.
La subsecretaria de Promoción de los Derechos del Niño y del Adolescente de la Secretaría Especial de Derechos Humanos de la Presidencia de la República, Carmen Oliveira, dijo a IPS que aunque había otros medios de denuncia, como un número telefónico gratuito, faltaba un instrumento en Internet, un medio considerado uno de los "nuevos escenarios de la explotación sexual infantil".
Oliveira es también coordinadora del Tercer Congreso Mundial de Combate a la Explotación Sexual de Niños y Adolescentes, que finaliza este viernes en Río de Janeiro.
"En la ultima década estuvimos muy ocupados combatiendo la explotación sexual infantil en hoteles, carreteras y otros ambientes de prostitución y descuidamos el crecimiento de Internet, que trajo nuevas formas de violación a los derechos humanos", señaló Oliveira.
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Además, agregó, combatir esos delitos en Internet es más complicado, por la ausencia de reglamentaciones y porque se trata de "crímenes transnacionales típicos".
Brasil, según la Policía Federal, ocupa el cuarto lugar en el mundo en materia de paidofilia. Cuenta con un banco de datos de denuncias, que ha recibido más de un millón en los últimos tres años y tiene catalogadas 200.000 páginas de pornografía en Internet, dijo a IPS el coordinador de Safernet, Thiago Tavares.
Al sitio de denuncias, agregó, se sumarán otras iniciativas, como cursos de entrenamiento para policías y la difusión de una cartilla de orientación para niños y adolescentes.
Durante el Congreso — que busca articular políticas internacionales para combatir la pornografía en Internet— también se anunció que el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, promulgó una ley para aumentar de seis a ocho años la pena máxima para la explotación sexual de niños y adolescentes en Internet, delitos caracterizados por el mandatario como "animalescos".
Lo más novedoso, según Tavares, es que también se castigará la compra, posesión y divulgación para la venta de material pornográfico, "llenando lagunas que dificultaban la condena de los criminales".
"No exagero si digo que esta ley es una de las más avanzadas del mundo en relación al combate de diversas formas de abuso sexual contra niños", enfatizó.
Tanto Tavares como Oliveira consideran que para que la ley sea efectiva se requiere la participación de los proveedores de servicios en Internet.
Tavares hizo referencia a una acción judicial contra Google, la empresa cuyo producto más popular es el motor de búsqueda en Internet que tiene ese nombre.
Pero Google también opera, entre otros, el sitio llamado Orkut, que se define a sí mismo como "una comunidad online designada para hacer su vida social más activa y estimulante". En su página, a la que se debe acceder con un nombre de usuario y una contraseña, invita a las personas a "compartir sus videos, fotografías y pasiones, todo en un solo lugar".
En el juicio, se logró que Google colabore con las autoridades para identificar a personas que participan de la explotación sexual de niños y adolescentes, mediante orden judicial.
Además, agregó Tavares, se consiguió que Orkut —así llamada porque es el resultado de la idea de un empleado de Google, Orkut Buyukkokten— instale un filtro para impedir la descarga de pornografía infantil.
De las 636.350 denuncias recibidas por Safernet entre enero y julio, casi 95 por ciento de ellas se referían a perfiles de usuarios de Orkut. Poco menos de la mitad de ese total se refería específicamente a pornografía infantil.
Oliveira llamó la atención sobre otros "nuevos escenarios" que a su juicio son "importantísimos" en el tema de la pornografía infantil, como las empresas de comunicación.
"Existe una erotización precoz en los medios y en la publicidad que nos preocupa. Es lo que llamamos un 'acortamiento' de la infancia. Vemos niñas de 9 años con cuerpos erotizados como adolescentes, lo que acaba provocando mayor tentación de los adultos al verlas no como niñas sino como mujeres adultas", afirmó.
Lula alertó sobre otro obstáculo en el combate a la explotación sexual infantil.
"Es necesario acabar también con la hipocresía religiosa, que no permite que este tema sea tratado a la luz del día", dijo al llamar la atención sobre el papel de la familia, donde la educación sexual "es tan importante como la comida".
