La ampliación a los sábados del programa Hoy No Circula, que restringe el tránsito vehicular en la capital de México, abatió de forma marcada la contaminación. Mediciones posteriores a la nueva restricción, vigente desde el 12 julio, indican que la contaminación del aire descendió 32 por ciento en promedio si se comparan los cinco primeros sábados en que se aplicó la medida con los mismos días de 2007, según datos de la Secretaría de Medio Ambiente capitalina, entregados a Tierramérica.
La prohibición de circular los sábados rige de forma escalonada para todos los automóviles, según el número de terminación de las placas.
La medida, que algunos consideraban inútil, se añadió a la que rige de lunes a viernes, adoptada hace una década. En la ciudad de México y en el vecino estado homónimo viven 20 millones de personas y circulan cuatro millones de vehículos.