La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO) se sumó a la guerra en Perú contra una plaga de langostas que el año pasado destruyó más de 20 mil hectáreas de bosques y de cultivos. Las langostas que devastan la provincia de Cajamarca, en la sierra norte de Perú, han resistido los lanzallamas del ejército y los insecticidas arrojados por helicópteros.
Tampoco fue eficaz hasta ahora la iniciativa del gobierno de comprar langostas a los campesinos para alimento de ganado y aves.
La participación de FAO tendrá lugar a través de un proyecto de cooperación técnica firmado con el gobierno el 9 de este mes.