Entre enero y agosto de este año, 52 fincas agrícolas de El Salvador recibieron el sello verde, que certifica el apego a estrictas normas ambientales, otorgado por la organización internacional Alianza para los Bosques (Rainforest Alliance). El sello, que fue entregado a fincas que comprenden un área sembrada de mil 112 hectáreas, reconoce la protección de bosques, ríos y fauna, la reducción del uso de plaguicidas y el fomento de la educación ambiental, entre otras cosas.
Otras 196 fincas en nueve departamentos del país aguardan la certificación.