El gobierno de Honduras concedió por 20 años a la privada Fundación Ecológica de Tegucigalpa el manejo y rescate del principal pulmón ambiental de la capital, el cerro Juana Laínez. Allí se pretende sembrar unos 30 mil árboles en los próximos tres años, así como construir un centro ecológico recreativo. Las labores comenzarán en tres semanas y contarán con un fideicomiso estatal de 1,3 millones de dólares.
«Esperamos en cinco años tener un atractivo ecológico de primer orden para la ciudad, que sea económicamente sostenible», dijo a Tierramérica la directora de la Fundación, Luisa María Willingham.
La concesión será supervisada por la cámara empresarial de Tegucigalpa, la alcaldía y el Ministerio del Ambiente. La capital, de 1,2 millones de habitantes, ha cambiado su clima de fresco a semiseco a causa de la deforestación y la migración interna.