Cuba colocará este año en el mercado internacional entre cinco mil y siete mil toneladas de azúcar orgánica, obtenida a partir de caña cultivada en suelos tratados con nutrientes naturales y sin uso de plaguicidas químicos. La refinería Carlos Baliño, en la septentrional ciudad de Santa Clara, a 300 kilómetros de La Habana, es la única del país que produce este tipo de azúcar, que se cotiza a precios superiores que el producto tradicional.
Las mejoras técnicas permitirán llevar la producción a trece mil toneladas en los próximos años, según autoridades. El año pasado cuatro mil 200 toneladas de azúcar ecológica se vendieron a los mercados de Dinamarca, Holanda y Canadá a un precio superior a 400 dólares la tonelada.