La mariposa monarca aún corre peligro por la tala ilegal de los bosques donde anida, advirtió el escritor y ecologista Homero Aridjis, tras el anuncio de que la población de esa especie ha mostrado este año signos de recuperación. En 2002 murieron millones de ejemplares debido a una intensa ola de frío y a la progresiva reducción de bosques.
Pero para enero pasado, la población de monarcas llegó a cantidades similares a las de 1993 en México, según el Fondo Mundial para la Naturaleza.
Las autoridades no tienen una política clara y firme contra la tala, por lo que la monarca sigue amenazada, declaró Aridjis, presidente del ambientalista Grupo de los 100 y uno de los mayores conocedores de esa especie en México.
En las últimas tres décadas se perdió 44 por ciento de áreas boscosas adonde llega la especie, que todos los fines de año migra cinco mil kilómetros desde los septentrionales lagos de Canadá y Estados Unidos hacia el sur.