Alrededor de diez mil hectáreas de bosque nativo fueron destruidas por los incendios registrados en el sur de Chile en las últimas semanas. Las principales zonas afectadas corresponden a los parques nacionales de Huerquehue, Malleco, Tolhuaca y Conguillío, ubicados en la novena región, 700 kilómetros al sur de Santiago.
Las autoridades advirtieron que el daño ambiental es incalculable y que se perdieron especies milenarias, como araucarias, que constituyen uno de los mayores patrimonios forestales del país.
El área de bosques incendiada se triplicó en enero, respecto del periodo anterior, informaron.