La empresa eléctrica Endesa podrá continuar la construcción de la central hidroeléctrica Ralco, ya que la Corte Suprema de Justicia rechazó un recurso de protección presentado por dos indígenas opuestas al proyecto. Berta y Nicolasa Quintremán, de la etnia pehuenche, impugnaron la legalidad de los decretos que autorizan la construcción de Ralco, pero el máximo tribunal desestimó su argumentación.
No obstante, las obras no podrán reanudarse hasta que todos los pehuenches residentes en la zona acepten la permuta de las tierras que serán cubiertas por el embalse.
Ubicada en la zona del Alto Bio Bio, a 600 kilómetros de Santiago, la central Ralco inundará uno de los ecosistemas más ricos de Chile.