Bacterias que se alimentan de azufre pueden ser la solución a la contaminación que provocan las pilas alcalinas en desuso, aseguran científicos de la argentina Universidad Nacional de San Martín. Los investigadores desarrollaron un reactor experimental tras aislar la bacteria Acidithiobacilus thiooxidans, que habita en las australes termas de Copahue, provincia de Neuquén, ya utilizada con éxito en la metalurgia del cobre y del oro.
Los científicos colocaron las bacterias en el reactor con pilas desechadas. Tras un periodo, los microorganismos transformaron el azufre en ácido sulfúrico, que disolvió completamente las baterías.
Los restos metálicos pueden recuperarse mediante técnicas de electrólisis.
El reactor funciona bien y podría ser utilizado a gran escala por su bajo costo y escaso impacto ambiental, dijo el biotecnólogo Gustavo Curutchet, de la Universidad de San Martín.