«Empieza un cambio para Guatemala. De ahora en adelante soy presidente, ya no hay bandera partidaria». De este modo el socialdemócrata Álvaro Colom llamó a la unidad del país tras proclamarse ganador de la segunda vuelta electoral.
"Estamos muy agradecidos con Dios y con el pueblo de Guatemala", dijo el fundador y líder de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) en su residencia de la capital guatemalteca, desde donde convoca desde este lunes a "la coalición nacional a todos los guatemaltecos".
Los ciudadanos "han dado un no a la trágica historia de Guatemala", añadió enfático, en referencia a la posición de su competidor, el derechista general retirado Otto Pérez.
Colom, quien propone combatir la violencia ciudadana "con inteligencia", se impuso a Pérez y su promesa de "mano dura" contra el delito en los comicios del domingo, que se desarrollaron en calma y con un alto nivel de abstención.
El dirigente socialdemócrata, que ganó en 20 de los 22 departamentos del país, tiende una "mano justa y solidaria" y propone un gobierno de conciliación nacional con prioridad en la lucha contra la pobreza, la inseguridad ciudadana, la corrupción e impunidad.
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Con 99,13 por ciento de los circuitos electorales escrutados, este ingeniero industrial que competía por tercera vez consecutiva por la presidencia obtiene 52,83 por ciento de los sufragios válidos, mientras que el restante 47,17 por ciento le corresponde a Pérez, el candidato del Partido Patriota (PP) que sólo ganó en la ciudad de Guatemala y en el norteño departamento de Baja Verapaz.
El vicepresidente electo, Rafael Espada, un cirujano cardiovascular, hizo también un llamamiento a todos los partidos políticos "para trabajar unidos" por el país y agregó en una entrevista emitida por televisión que, "como médico, sueño con una Guatemala que tenga el mejor sistema de salud de América Latina".
Las últimas encuestas previas a los comicios proyectaron porcentajes de votos muy parecidos a los finalmente obtenidos por ambos aspirantes, pero con una mínima ventaja para Pérez que no superaba el margen de error de los sondeos.
El lema de "mano dura" contra el crimen del PP, que se presentaba por primera vez a comicios, logró calar en una buena parte de la población hastiada de violencia ciudadana.
Colom, de 57 años, había quedado en primer lugar en la primera ronda presidencial del 9 de septiembre, en las que simultáneamente se eligieron también alcaldes y diputados, con 25,62 por ciento de los votos, 4,27 puntos porcentuales por encima de Pérez. Al no lograr ninguno la mitad más uno de los sufragios válidos, requeridos para llegar al gobierno directamente, pasaron a una segunda ronda.
El proceso electoral del domingo se desarrolló con calma y normalidad. El jefe adjunto de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea (UE), José Antonio de Gabriel, valoró la tranquilidad de la jornada, pero destacó la alta abstención registrada, que superó 53 por ciento.
"La participación ha sido muy baja", observó a IPS De Gabriel, quien achacó la escasa afluencia de votantes a la prolongada campaña, que comenzó incluso antes de la convocatoria oficial el 2 de mayo, y a un puente laboral largo que incluyó los feriados por la conmemoración del Día de los Difuntos, el pasado jueves, hasta este martes.
El actual presidente de Guatemala, Oscar Berger, de la derechista Gran Alianza Nacional (GANA), fue elegido con 46 por ciento de los sufragios, y su antecesor Alfonso Portillo, con 40 punto.
Con estas elecciones, a las que estaban convocados 5,9 millones de guatemaltecos, se pone fin a la que ha sido considerada la campaña más violenta de los últimos 20 años, con más de medio centenar de asesinatos de personas, entre militantes, candidatos y familiares suyos,
El 8 de octubre fue asesinada la secretaria del bloque parlamentario del PP, Aura Salazar, y tres días después renunció el jefe de campaña de la UNE, José Carlos Marroquín, quien abandonó el país con su familia tras denunciar que había sido amenazado por el crimen organizado.
Además, las "campañas sucias" y acusaciones entre los aspirantes a la presidencia han estado a la orden del día y algunos analistas consultados por IPS opinan que han podido desmotivar a los electores.
Mientras Pérez acusaba a Colom de recibir fondos de las mafias y el narcotráfico, el candidato de la UNE ahora ganador recordaba que su rival fue oficial del ejército durante la represión a la guerrilla izquierdista en la guerra civil de 1960 a 1996, que dejó más de 200.000 muertos, la mayoría indígenas.
"Hoy se elige por primera vez en 50 años un gobierno de corte socialdemócrata sin compromiso con sectores socioeconómicos y completamente libre ( ). Guatemala ya ha tenido mano dura durante 50 años y ha costado 200.000 vidas, pobreza y el abandono de los pueblos indígenas", declaró el domingo a periodistas un triunfalista Colom tras depositar su sufragio.
El ahora presidente electo calificó a los emigrantes guatemaltecos en Estados Unidos de "héroes que sostienen la economía del país" y anunció que su gobierno trabajará porque puedan votar desde el exterior. "Es un derecho sagrado", aseguró.
Berger deja a Colom un país asolado por la violencia, la corrupción y la pobreza, a pesar de ser la mayor economía de América Central y tener un crecimiento económico que supera cinco por ciento en los últimos años.
La estabilidad macroeconómica ayuda, pero no basta para combatir la pobreza, por lo que este sexto gobernante de la era democrática, que asumirá el 14 de enero para un periodo de cuatro años, deberá aplicar políticas sociales eficientes, mejorar la rendición de cuentas y frenar la corrupción administrativa, coincidieron los analistas.
A la violencia, relacionada con las maras, como se llaman aquí las pandillas juveniles, y el narcotráfico, se suma la penetración del crimen organizado en las estructuras estatales.
Para ayudar a investigar la infiltración de la mafia en las instituciones, en enero empezará a trabajar en el país la Comisión de Investigación contra la Impunidad en Guatemala, fruto de un acuerdo suscrito en 2006 entre el gobierno de Berger y la Organización de las Naciones Unidas.
La impunidad reina. Sólo 25 por ciento de los delitos llegan al conocimiento de las autoridades, una mínima parte se investiga y otra todavía más pequeña llega al proceso penal.
Según informes de la Procuraduría de los Derechos Humanos, en el primer semestre de este año se cometieron 2.857 homicidios, en su mayoría con armas de fuego, en tanto que en 2006 se registraron más de 5.000.
Iduvina Hernández, directora de la no gubernamental Seguridad en Democracia (Sedem), opinó que el mayor reto del nuevo presidente será "cumplir las expectativas de solución a los problemas de inseguridad y enfrentar la situación de precariedad económica que podría verse agravada en los próximos meses con el impacto de las alzas del precio del petróleo y de otros productos".
La pobreza alcanza a 51 por ciento de los 13 millones de guatemaltecos y 15,2 está en la indigencia (con ingresos menores a un dólar diario), siendo el área rural, las mujeres y los indígenas los más desfavorecidos.
Las nuevas autoridades tendrán que encarar realidades trágicas, como que 48 por ciento de los niños y niñas padecen desnutrición crónica y que de cada 100.000 nacidos vivos se registran 121 muertes maternas, según datos del II Informe de Avances en el Cumplimiento de las Metas del Milenio en Guatemala.
Este país, que ocupa la posición 117 en la lista de desarrollo humano que incluye a 177 naciones, más de 40 por ciento de la población es indígena, integrada sobre todo por 22 comunidades etnolingüísticas de origen maya y, en menor proporción, por las comunidades xincas y garífunas.
El analista político Gustavo Porras consideró en declaraciones a IPS que uno de los principales desafíos de Colom, un empresario textil antes de dedicarse a la política, será "cómo lograr acuerdos políticos que le permitan gobernar sin contar con mayoría en el Congreso" legislativo, una institución "que tiene un poder enorme".
El parlamento quedará constituido cuando asuman los candidatos elegidos el 9 de septiembre con 48 diputados de
La UNE contará sólo con 48 de los 158 diputados que conforman el parlamento, y gobernará en 102 de los 332 ayuntamientos del país.