Comunidades campesinas mexicanas que habitan en áreas de hibernación de las mariposas monarca (Danaus plexippus), reciben fondos por cuidar sus bosques. El pago se efectúa «dos veces por año a las comunidades que logran proteger su bosque», para compensar el valor que tendría la madera talada, dijo a Tierramérica Jordi Honey, del Programa Mariposa Monarca de la filial mexicana del Fondo Mundial para la Naturaleza.
«Intentamos fortalecer el proceso de organización de los ejidos y comunidades para que ellos puedan tomar las mejores decisiones», añadió.
La medida forma parte de la conservación de la reserva de la biosfera Mariposa Monarca, que abarca más de 50 mil hectáreas al este de la capital, y donde cada año llegan millones de mariposas desde Canadá y Estados Unidos, para pasar el invierno boreal.