Una piscina natural conocida como Los Cangilones del Río Máximo, en la central provincia cubana de Camagüey, volverá a recibir bañistas todo el año, tras ser salvada de la contaminación de desechos de un centro de cría de peces de la zona. La rehabilitación se logró con un canal de unos tres mil metros para el desagüe y tratamiento de residuos, aprovechando las condiciones naturales de la cuenca, la siembra de árboles en las riberas, el manejo de recursos hídricos, la educación ambiental y un sistema de inspección para preservar el área, entre otras acciones aún en marcha, dijo a Tierramérica Mayra González, directora de Medio Ambiente en Camagüey.
El lugar, patrimonio ambiental de la provincia, estuvo clausurado por más de una década. Ahora se limitará el ingreso a 500 visitantes diarios, añadió González.