La Corte Suprema de Justicia de Chile ordenó el 6 de enero el retiro de una antena de telefonía celular emplazada en el casco histórico de la ciudad de La Serena, 460 kilómetros al norte de Santiago, por atentar contra el ambiente y el patrimonio arquitectónico. La empresa Telefónica CTC Chile, de capitales españoles, deberá retirar la antena y asumir los costos de traslado. Por primera vez, el máximo tribunal chileno se pronuncia en una demanda por daño al patrimonio ambiental.
La instalación trasgredió leyes ambientales, de urbanismo y de monumentos, según el fallo que acogió una demanda entablada por el Consejo de Defensa del Estado.
Telefónica recurrió «al curioso arbitrio de disfrazar (la antena) o vestirla de palmera», afirma el texto.