Entre las seis y siete de la mañana de este viernes no hubo noticias en el municipio de Saravena, en el oriental departamento colombiano de Arauca. A cambio, el equipo periodístico de Notifrontera, de radio Sarare Estéreo, pasó una breve declaración y música nacional.
Notifrontera es el único informativo de Saravena. Aunque también entra radio La Voz del Cinaruco, que emite desde Arauca, la capital de este departamento fronterizo de Venezuela.
"Nosotros tenemos la sintonía aquí, por nuestra calidad, nuestra labor con la comunidad, porque estamos haciendo nuestro trabajo con humildad y sencillez", dijo a IPS Emiro Goyeneche, coordinador de Notifrontera.
Su voz suena triste y cansada. "La situación es crítica", agregó.
Contó que desde el domingo pasado "aquí en el municipio no se está moviendo ni una mosca, y tampoco en el departamento", pues las rebeldes izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) declararon un "paro armado indefinido".
El jueves a las 06:09 hora local estaba la línea abierta para los oyentes, en el espacio llamado Participación Comunitaria. Los periodistas le piden el nombre a la persona y la pasan al aire.
"Soy el comandante del Frente 45 de las FARC", dijo un hombre al otro lado de la línea, "tengo un comunicado para leer", añadió según narra Goyeneche.
Le dio lectura, la llamada se cortó, y al rato volvió a comunicarse, muy molesto. "Habló al aire, lo leyó completo, le hice dos preguntas, la última no me la contestó y colgó", añadió el coordinador del noticiero de Sarare Estéreo.
Las FARC, en armas desde 1964, enviaron el martes a cuatro emisoras de Arauca dos comunicados y un papel adicional, a mano, solicitando la lectura completa de ambos textos y por tres veces diarias durante dos días. "Si no obedecen esta orden serán declarados objetivo militar", dijeron.
"Leímos apartes los comunicados, lo hizo una locutora", relató Goyeneche. Al día siguiente recibieron muchas llamadas amenazantes porque no los habían leído en su integridad. Avisaron, como querían las FARC, que a partir del paro armado "se prohíbe el tránsito de todo tipo de vehículos en las vías araucanas".
Los periodistas de Notifrontera fueron citados luego al batallón del ejército Revéiz Pizarro, con sede en Saravena.
Allí, "Estado, ejército, policía y hasta la personería (a cargo de la defensa de los derechos humanos en los municipios) y la administración municipal nos dijeron que nos abren proceso, que nos pueden meter presos y hasta nos cierran la emisora. Lo manifestó el jefe jurídico del batallón, nos habló en término jurídicos, tipificó el delito por haber leído el comunicado", indicó Goyeneche.
"Nos dijo que éramos caja de resonancia de la guerrilla. Le dijimos que lo hicimos bajo amenaza de muerte. Entendió más la situación el mayor de la policía, que él. La vulnerabilidad de nuestra vida es sumamente grande", agregó.
Por la llamada del jueves, los militares "pidieron la grabación y no nos dijeron nada más." En Sarare Estéreo trabajan 14 personas. En el equipo de Notifrontera, seis periodistas.
Parar por un día "fue una decisión del equipo de trabajo", explicó.
En su declaración, los periodistas expresan "que nos digan si cerramos el noticiero o si no, que nos dejen trabajar. Que el Estado no nos presione y que la guerrilla nos respete la libertad de prensa. Que estamos trabajando con la comunidad y creemos que estamos haciendo un buen trabajo", resumió Goyeneche.
"Es que lo que uno busca es trabajar, poder informar, hacer un noticiero con ética. Y los unos dicen que lea y los otros que no lea. Es una situación muy difícil", agregó.
Por amenazas anteriores, Goyeneche tiene como protección estatal un celular y un "padrino", que es un miembro de la fuerza pública que hace un seguimiento dos veces por semana sobre cómo van las cosas. No le anunciaron medidas adicionales. Él los justifica: "es difícil cuidarse ellos mismos".
En sus comunicados, las FARC indican que conmemoran este viernes el deceso por causas naturales hace 17 años de Jacobo Arenas, segundo al mando de las FARC e ideólogo.
Recuerdan que, en el marco de por entonces exitosas negociaciones de paz lideradas por Arenas, en 1985, "las FARC dieron impulso al movimiento político Unión Patriótica (UP), única oportunidad que tuvo el pueblo colombiano de forjar una esperanza política alternativa de izquierda, la cual fue exterminada a sangre y fuego" con un saldo de más de 5.000 asesinados.
Además, la guerrilla denuncia que "en este momento se encuentran desplazados la gran mayoría de habitantes" de por lo menos 44 veredas (vecindarios rurales) de tres municipios araucanos; que "alrededor de 3.000 desplazados" se encuentran en Venezuela y que se construye una base militar "gringa" (estadounidense) en El Lipa, municipio de Arauca.
También afirman que "en los últimos tres meses han sido asesinados más de 30 civiles en el municipio de Tame".
Justo cuando arranca la campaña electoral, las FARC piden la renuncia del gobernador, los siete alcaldes, todos los concejales municipales (legisladores locales), así como todos los candidatos que aspiran a sucederlos en las elecciones municipales y regionales previstas para el 28 de octubre.
"El proceso electoral aquí va a ser sumamente difícil", advirtió Goyeneche.
Las FARC "quieren aumentar la abstención, que la gente no concurra a las urnas y haya un descalabro del funcionamiento institucional", dijo a IPS León Valencia, director de la Corporación Nuevo Arco Iris.
El promedio nacional de abstención es de 57 por ciento del padrón en las elecciones parlamentarias y poco menos en las locales.
En los comicios para renovar el Congreso legislativo de marzo 2006, las FARC declararon un paro armado y "lograron subir en 12 por ciento la abstención en las zonas donde están", agregó Valencia.
"En Caquetá (departamento en el sur de Colombia) lograron subirla en 18 por ciento frente a la media nacional", señaló.
La segunda guerrilla de Colombia en importancia, el izquierdista Ejército de Liberación Nacional (ELN), también surgida en 1964 y en diálogos con el gobierno del derechista Álvaro Uribe, últimamente respeta el voto.
En los comicios de 2006, en Arauca, donde el ELN "tiene más influencia social, no interfirió en las elecciones parlamentarias y la abstención se redujo en 12 por ciento. De manera que sí tiene influencia que una guerrilla tome una decisión en uno u otro sentido", afirmó Valencia.
Añadió que en ese departamento las FARC habían declarado paro armado, pero debido a "la posición que asumió el ELN no pudo finalmente obstruir las elecciones" allí.
Nuevo Arco Iris detecta "una tensión muy alta" en zonas de las FARC, donde "están amenazados más de 200 alcaldes y 1.200 concejales en este momento", por esa guerrilla.
En cambio, los comicios sí parecen interesar vivamente a la extrema derecha paramilitar, enemiga acérrima de los rebeldes izquierdistas. Hasta los políticos que están en la cárcel por alianzas con esas milicias "están actuando electoralmente", dijo Valencia.
"La mayoría de las personas, parlamentarios y dirigentes que reseñamos como elegidos en las zonas paramilitares y con compromisos con ellos están libres, actuando en política y van a participar activamente en las próximas elecciones", advirtió.
"Hay 176 personas que han sido reseñadas pero es una parte minúscula frente a todo lo que fue el proceso de (la llamada) parapolítica que se vivió en las elecciones de 2002, 2003 y 2006", añadió. El actual parlamento tiene al menos 35 por ciento de votos paramilitares.
Así comienza la campaña para los comicios de Colombia, donde el miércoles se cerró la inscripción de candidatos. Para Nuevo Arco Iris, la tercera parte de los municipios están en riesgo electoral, para el gobierno, el 25 por ciento.
Son unos 70.000 aspirantes de 244 partidos nuevos. De esas agrupaciones, 89 inscribieron un solo candidato.
Semejante avalancha echa por tierra una reforma política de 2003 para institucionalizar y organizar el sistema de partidos, reduciéndolos a 16. La modificación marcó la muerte legal de la UP, con su militancia exterminada.
Para Elizabeth Ungar, politóloga y directora de Congreso Visible, esto "demuestra claramente que las reformas institucionales, si no hay voluntad política, no logran los cambios deseados".
"En esos partidos se están camuflando una serie de actores oscuros de la política para llegar al poder", advirtió. El mapa político comienza a mostrar "que los paramilitares o sectores y actores vinculados con ellos están haciendo presencia muy fuerte", puntualizó ante la consulta de IPS.
